Supersuckers: Suck It

El próximo año se cumplen ni más ni menos que veinte años desde que los americanos Supersuckers editasen lo que muchos consideran, junto con el clásico “La Mano Cornuda” de 1994, su obra maestra: “The Evil Powers of Rock And Roll” fue un disco que sirvió de auténtico revulsivo en un momento en el que el rock más punkarra e incendiario estaba protagonizando una vuelta en Europa de la mano de Backyard Babies, Gluecifer y The Hellacopters entre otros.

Supersuckers pusieron su parte desde el otro lado del Atlántico y, desde entonces la banda ganó una buena cantidad de nuevos fans y empezó una gira que prácticamente solo se detuvo cuando el grupo se rompió temporalmente en 2009. No pudieron contenerse y volvieron apenas tres años después, con más ganas que nunca y con dos discos que han estado a la altura, “Get The Hell” y “Holdin’ the Bag”, ambos editados por Acetate Records.

Supersuckers a tope

El tono general en este “Suck It!” es de sana venganza, más de 25 años desde la edición de su primer trabajo. Ese título, que no deja de ser un “chúpate esa!” indica que la banda está en plenas facultades y lo saben. Si bien aquel “Evil Powers…” del 99 fue un hito, este nuevo trabajo no anda lejos. Desde la inicial “All of the Time” y la heredera de AC/DC “The History of Rock And Roll”, donde mencionan a colegas como Nashville Pussy, L7, Electric Six, Zen Guerrilla o New Bomb Turks es evidente que este disco viene cargado de grandes temas.

Será por la similitud vocal, pero en el mundo del rock post- Lemmy, la voz tan similar de Eddie Spaghetti suena a gloria. Su tono rasgado y desafiante en canciones como “Breakin’ My Balls” sigue siendo el 70% de la identidad de Supersuckers, mientras que el sonido de ampli de válvulas demasiado usado de Marty Chandler es el 20% restantes – el batería Chris Von Streicher se llevaría el 10% que falta.

Salvajes como siempre

Rítmicamente impasibles, los nuevos temas de Supersuckers incitan a moverse, especialmente la acelerada y cachonda “What’s Up With This Mf’n Thing”. Si buscamos paralelismos, este vendría a ser el “I Want The Drugs” de este disco. Para completar la dosis, una versión del “Beer Drinkers & Hell Raisers” de ZZ Top ofrece un final a la altura para un trabajo excelente.

Un disco para escuchar con el volumen a tope y una muestra de como Spaghetti ha sido capaz de sobreponerse a sus problemas de salud, cuando un cáncer de garganta puso en peligro el seguir haciendo lo que más le gusta hace tres años. Si acaso, su voz ha quedado más rasgada e incendiaria y -buscando el lado positivo al asunto- eso tan solo hace que Supersuckers sean un poco más cañeros que antes.