Stone Broken: Ain’t Always Easy

Gran disco por parte de unos Stone Broken que asoman con fuerza y ganas. Si este trabajo hubiera aparecido en la era del post grunge hubiera vendido millones de unidades y sonado en todas partes. La calidad es tremenda y los temas redondos, pero a día de hoy el estilo no mueve discos de platino ni llena estadios.

Decir que Stone Brokenes la respuesta inglesa a Alter Bridge no sería nada descabellado. Su gusto por los 90 y a la escena post grunge es un hecho. Dotan a su música de una base accesible y cercana al pop pero bien revestida por el andamiaje de unos riffs duros y una base rítmica potente. Estribillos pegadizos, un gran cantante y guitarra como es Rich Moss.

La respuesta inglesa a Alter Bridge

Mucha personalidad y tablas demostraron en el Garage Sound de Madrid de este mismo mes de junio. “Ain’t Always Easy” (Stone Broken) es su segundo disco y la verdad es que la cosa va en serio, y más fichando por Spinefarm Records y actuando en el Hellfest. Abren de forma inmejorable con la potentísima “Worth Fighting For”, tema que resume todas sus muchas virtudes. Todo un himno descarado y accesible. Son temas cortos y directos de los que se pegan a la primera y en “Let Me See It All” ya estamos ante un medio tiempo trabajado con una línea a lo Alice in Chains, pero sin perder personalidad.

Otro de los puntos fuertes son esos coros sutiles pero presentes que visten bien a los temas. A pesar de que las canciones son cortas no escatiman en solos (gran trabajo de Chris Davis), pues al fin y al cabo hay mucho hard rock.  “Follow Me” me conquistó en directo, pero en disco no termina de alcanzar la rotundidad vivida sobre el escenario. A pesar de ello estamos ante uno de los grandes cortes de la obra. Impecable estribillo repleto de fuerza y comercialidad en el corte más trabajado y completo de la obra.

La producción es ideal para el estilo destacando sobre todo la pegada de Robyn Haycock. Le sigue los pasos la luminosa “I Believe”, de alma southern rock, pero pasada por su filtro personal. “Doesn’t Matter” es realmente brillante con dejes a Stained e incluso a Nickelback. Melódica, siendo pop elaborado con guitarras y base contundente. Siguiendo con la línea popera destacar “Heartbeat Away” cercana a Gun.

Excesiva comercialidad en las baladas de Stone Broken – Ain’t Always Easy

Las baladas son una baza importante para el grupo a pesar de que para un servidor es lo más intrascendente de la obra. “Home” es bella pero tira de típica y algo ñoña. Buen solo de Chris Davis al solo dotándola de más fuerza y quedando a medio camino entre el hard rock 80 y Alter Bridge. Mismos parámetros para “Anyone” con piano incluido de fondo. Son temas en los que luce la voz de Rich y terrenos en los que el combo inglés se desenvuelve a las mil maravillas.

Vuelven las guitarras en la trepidante “Just a Memory” tirando de efectos a la voz y emanando buenrollismo. Genial el riff dominante en “Other Side of Me”, cadenciosa y pegadiza, tirando de potencia y melodía. Se despiden con “The Only Thing I Need”, el tema más exageradamente comercial, tan meloso como intrascendente. El único pero de la obra es que no tenga una superproducción al nivel de Nickelback, aunque el trabajo hecho en los Long Wave Recording Studios es perfecto para demostrar la calidad del grupo inglés.

Veremos si su descarada comercialidad les aúpa y les pone en el mapa pues de calidad van sobrados. Apuntad el nombre del grupo y dadles una oportunidad pues no va la escena sobrada de grupos como Stone Broken.