Si eres fan de The Company of the Snakes y de la etapa británica de Whitesnake, este disco es absolutamente imprescindible. Grandes nombres… enormes… Micky Moody, Adam Wakeman, Neil Murray… Un elevado tanto por ciento de la base de Whitesnake de la etapa británica; y con ellos un cantante enorme. Chris Ousey es enorme, un coloso. Menuda voz. Pura escuela Paul Rodgers. El feeling coseguido a lo largo del disco pone el vello de punta. Un auténtico festival de hard rock con bases de blues con las que han edificado hasta 12 cortes que funcionan de maravilla. Creo que si Coverdale escucha esto le dan ganas de volver a los orígenes. Y a la postre otro gran acierto de la escudaría Frontiers por reunir a esta gente. Y si este disco llegó a mis manos es sumamente curioso, pues creí que era el grupo en el que participaban los dos hermanos Johansson (Staratovarius-Hammerfall). Le quité de las manos de Ramos el disco aludiendo que ya había hecho la crítica de sus anteriores CDs.

La sorpresa es mayúscula. Sólo hay que pinchar la inicial “My Angel” para comprender de lo que son capaces esta gente. Puro feeling y mucho ángel en la composición. La base acústica le da un toque auténtico para que el grupo arretea con todo. Los teclados de Wakeman son una de las claves de su sonido, pero es el doble ataque guitarrero con Laurie Wisefield (Wishbone Ash) y Moody lo que te transporta más allá. Otro detalle para que quede claro que esta gente ha hecho algo muy grande es el inicio de “Falling Leaves”. Un Ousey de otro mundo nos adentra en un medio tiempo sumamente inspirado en el que unos coros negros de fondo arropan una composición sublime. Grandísimo final con solazo de guitarra en fade out. La Bad Company sale del armario en la feliz y resultona “Accident Prone”. Buenrrollismo por bandera y un deje soul excepcional.

Mentienen el buen rollo y el hilo de felicidad y buenas maneras la movidita y vacilona “Turn of the Screw” y la netamente rockera “A Little Rock and Roll”. La verdad es que ese teclado un poco a lo Quireboys le da a los temas un toque más tabernario y hasta sleazy, si bien de suciedad no tira precisamente esta gente. En “Stand Up” el grupo juega a ser Toto y lo consigue. Estribillo marca de la casa y una cadencia de esas que te queda desde la primera escucha. Mucho lucimiento instrumental y doble ración de puro feeling. El rastro de los mejores Great White también está bastante presente. Lo podemos identificar en “Cover Me in You” o en “Guilty As Charged”. Finalizan con “White Boy Blues” a modo de bonus. Otro disfrute a mucha velocidad y muchos decibelios. Un perfecto epílogo que resume bastante bien todo lo que hemos podido catar a lo largo del disco.

Discos como este hacen que poder ser crítico musical sea un auténtico placer. The Snakes, The Company of Snakes, Snakecharmer… Tanto da, si bien quizá estemos ante la mejor versión de esta gente. Música en mayúsculas y un disco muy a tener en cuenta. Cuando la música es buena, tanto da el estilo; pero si amas el hard 70-80 de bases blues este va a ser uno de los discos del año. Ousey es impresionante, pero el resto del grupo tampoco le va a la zaga. A veces cuando hablamos de supergrupo esperamos ver nombres rutilantes que todo el mundo conozca. Aquí quizá no hay el glamour de las grandes estrellas, pero si de muchos hombres que las hicieron brillar.

Jordi Zelig Tàrrega

Grupo:Snake Charmer

Discográfica:Frontiers Records

Puntuación:9

Canciones:

  1. My Angel
  2. Accident Prone
  3. To The Rescue
  4. Falling Leaves
  5. A Little Rock & Roll
  6. Turn Of The Screw
  7. Smoking Gun
  8. Stand Up
  9. Guilty As Charged
  10. Nothing To Lose
  11. Cover Me In You
  12. White Boy Blues

Año:2013