Adept: Silence the World

Ya hay muchas bandas practicando el estilo de metalcore-post hardcore combinando voces limpias con guturales… pero pocos provienen de Suecia. Adept dan un paso firme adelante con un buen disco si bien el material ni sorprende ni es nada nuevo, pero es innegable que la cosa funciona. Se mueven entre lo agresivo y lo comercial consiguiendo pegada, agresividad también pero buenos estribillos melódicos. Los temas son excesivamente similares entre si, si bien hay algún que otro trallazo que bien puede quedar como single. Destacan especialmente las guitarras graves que golpean a base de gruesos riffs y sobretodo la batería, con los juegos de doble pedal.

Son ya tres discos en el haber de Adept, y puede que este sea el mejor. Lo que está claro es que es el que mejor suena y el mejor producido. Riffs incendiarios como el de “Toughest Kids” les sitúan en el death metal claramente, pero en el estribillo entran las voces limpias combinando con las desgarradas. Son temas cortos y muy directos. De entrada destaca sobretodo el brutal inicio con “Forever and a Day”, posiblemente lo mejor del disco. Muy definitoria de su estilo con un Robert Ljung a la voz demostrando quien manda… La otra que sorprende un poco y se sale del guión es “Means to an End (The Greatest Betrayer)” con la voz femenina invitada de Melanie Wehbe. Clarísimamente instalados en el post hardcore y haciendo brillar el juego de voces. En “Established 2004” hay una base de death clara pero las voces y los ritmos terminan apuntando hacia un hardcore similar al de los últimos álbums de Agnostic Front.

En “Secrets” la banda abraza lo comercial sin reparos, jugando con los fraseos y mostrando su cara más amable. Los coros hímnicos “Wooo, wooo” van apareciendo en algunas de sus composiciones como en la primera o en “The Ocean Grave”, que posee uno de los mejores estribillos de toda la obra. “Orion” es un interludio de casi dos minutos que sirve de intro y pausa el ritmo del disco. En “Friends that Used to Be” volvemos a encontrar otra gran demostración de toda la base rítmica del combo sueco, pero en especial de Gabriel Hellmark, que hace honor a su apellido. Finalizan con material más intrascendente como “Heart Vs Beat”, más en medio tiempo y con “Aftermath”, que reemprende “Orion” para terminar de descargar con otra buena pieza en la que destacan los detalles de guitarra y esa intro en crescendo.

Estoy seguro que son una de las mejores bandas suecas en su estilo, pero actualmente hay muchos otros combos que demuestran más personalidad y ofrecen productos realmente incendiarios. Adept funcionan y ofrecen un buen puñado de temas, pero está claro que todavía les falta algo para terminar de despegar. Seguro que todo este material sobre las tablas puede terminar de convencer, pero los rastros de monotonía y repetición de esquemas asoman una vez tras otra. Destacan eso sí, la voz y el batería, pero en tareas de composición tienen que darle otra vuelta de tuerca al asunto. Lo que si es de 10 es la producción y el sonido que han conseguido.