Stan Bush: Shine

La historia de Stan Bush se inicia en el año 1983, cuando el compositor y vocalista editó su primer y homónimo disco. A lo largo de los años 80 dio vida a STAN BUSH & BARRAGE, un proyecto que le dio sus primeros éxitos, con temas protagonizando bandas sonoras de películas como “Transformers: The Movie” y giras como telonero de Lou Gramm de FOREIGNER.

Ha colaborado con HOUSE OF LORDS, QUIET RIOT (como compositor) y con ALICE COOPER o Rick Spingfield (en los coros) y durante los últimos años ha estado trabajando con el sello italiano Frontiers ya fuera resucitando BARRAGE en 1998, o editando otros discos en solitario como su penúltimo “Language Of The Herat”, editado en el 2001.

Con este bagaje, está claro que Stan Bush no ha editado un disco de Thrash Metal ni de Sardanas. “Shine” es un excelente disco de composiciones pegajosas y azucaradas que hará las delicias tanto de chicas de 23 años con problemas sentimentales como de maduritos de 40 tacos que quieran sentirse rebeldes escuchando una guitarra escondida bajo una montaña de teclados y coros conmovedores. Y el caso, es que el disco está hecho de manera excelente. Stan tiene una voz suave, de tinte intimista, y con un amplio gusto por las melodías facilmente recordables. Baladas impresionantes como “What You Mean Tonight” o “When I Dream” dan muestra de su lado mas sensible, mientras que otros temas mas rockeros –pero sin exagerar- como “The Chance You Take” te harán mover el pié al ritmo en algún momento u otro.

Algo especialmente notable es el sonido algo similar a Bryan Adams que consigue en temas puntuales, como “Have You Ever Believed” o “Say It Ain’t Love”. Cabe recordar que Bush ha trabajado con Jim Vallance, colaborador habitual de Adams en sus años mozos como compositor. Así mismo, en éste disco encontramos a los teclados a Curt Cuomo, que ha trabajado con Steve Perry y con KISS en el infame disco grunge “Carnival Of Souls”.

Un disco para escuchar en días tranquilos, para escuchar de fondo mientras haces cualquier otra cosa. No es el típico Cd que te hará botar por toda la casa simulando tocar la guitarra con una raqueta de tenis.