Beatallica: Sgt. Hetfield’s Motorbreath Pub Band

Puro divertimiento, sin más. Eso es lo que Beatallica llevan por bandera y lucen orgullosos. De Milwakee tenía que salir un engendro tal como este hijo bastardo, llevando por padre a los de Liverpool y a los de San Francisco de cabreada madre. Aunque pueda parecer una aberración eso de cruzar títulos, letras y temas de ambas bandas es innegable que el resultado es más que interesante. De hecho Beatallica ya eran un secreto a voces entre frikis interneteros pero pocos imaginaban que llegarían a editar álbum oficial. Bueno, tampoco creí que vería a Nanowar en directo y no hace nada tocaron en el Martohell.

El caso es que la homónima “Sgt Hetfield's Motorbreath Pub Band” es una deliciosa adaptación del Sgt Peppers de los Beatles pero con unas guitarras más cercanas a Metallica y con la voz de Lennfield imitando a la perfección a James Hetfield. Y es que ¿qué podíamos esperar de sujetos como Jaymz Lennfield, Grg Hammetson, Kliff McBurtney o Ringo Larz?. Creo que la mezcla de nombres ya da una pista sobre lo que os podéis encontrar en el compacto. Normalmente son clásicos de Beatles Metalliczados. “Revol-ooh-tion” no está mal pero no llega al nivel de la primera. Mejoran las cosas en “Blackened the USSR” con un amago a “Battery” para arrancar luego con el clásico Beatles en el que los Fab Four rendían homenaje a los que inicialmente fueron sus rivales: los Beach Boys

El sonido es digno pero obviamente se nota que no posee la producción ni calidad de bandas mucho más consagradas. Esta gamberrada-juego debe haber caído simpática a algún padrino que se ha decidido a editarlo, y es que cruces como el conseguido en “A Garage Dayz Nite” enamoran. “Sandman” no consigue la brillantez de otras compañeras de compacto, al igual que “Harvester of Skelter” pero no dejan de ser curiosas revisiones francamente divertidas. En “Anesthesia (I'm only Sleeping)” demuestran que aparte de ser cachondos no son precisamente mancos con sus instrumentos. Pero si hay que quedarse con alguna, aparte de la homónima lo realizado en “Lepper Madonna” es genial, al igual que la tronchante “And Justice for All My Loving”, con este título sólo cabe imaginársela.

Ahora que ya tienen la bendición de los propios Metallica y un disco como Diós manda recogiendo lo más brillante que habían compuesto desde el pasado 2001 su camino se ve en una encrucijada. La idea y la parodia es excelente pero forzar la cosa e intentar sacarle más punta al asunto puede hacer que uno termine por pillarse los dedos. Gigatron eran dioses pero su segunda entrega mató a la leyenda y les hizo humanos definitivamente. Quizá deban matarlo aquí, ha sido realmente brillante.