Regresion: Santa Decadencia

Muchos son los años que llevan peleando estos hospitalenses dentro de la escena catalana. “Santa Decadencia” es su tercer disco y casi seguro que su trabajo más notable. Su hard rock con mucha clase, cantado en castellano, luce de maravilla a lo largo de los diez temas que componen este disco, de corte conceptual, ambientados en una ciudad ficticia y decadente. El grupo lleva peleando desde mediados de los 90 y ya hace años que se han hecho un hueco y ofrecen grandes conciertos por la geografía catalana.

Poseen un estilo muy definido y propio, moviéndose a medios tiempos en los que brilla especialmente la voz de Pedro, totalmente hard rock. Hay que achacarles que su mismo estilo hace que de entrada los temas suenen algo parecidos, pero escucha tras escucha, vas entrando en su particular universo sonoro y notas que la banda mima con sumo gusto todas y cada una de las composiciones. Destacan de inicio la inicial “Mil sirenas”, posiblemente el tema más contundente del disco, y la clase desarrollada en “Avenida del deseo”, un tema con mucho gancho y en el que brillan las guitarras de Pablo y Toni.

Buenos estribillos, un gran trabajo en cuanto a letras y unos cortes que en general te enganchan y hacen que menees los pies. Buen riff en “Sin final”, y mucho trabajo en la extensa y trabajada “Santa Decadencia”, con teclados muy protagonistas. Una perfecta demostración de las grandes posibilidades del grupo y un canto al glamour de alcantarilla. Uno de los grandes aciertos del disco ha sido que la producción ha conseguido un gran sonido de batería.

Grandes coros en el estribillo de “Territorio animal”, un posible single muy claro y efectista. “Sin final” nos muestra su cara más directa y netamente rockera, hecha por y para el directo, pues incluyen incluso un momento en el que se oye rugir a un ficticio público. “El teatro de los olvidados” da un bonito giro al tempo general del disco y surge una composición muy teatral, con mucho aire de musical y con unos teclados barrocos y protagonistas en clavicordio, muy a lo Stratovarius.

Esperemos que este trabajo signifique el merecido paso adelante que tanto merece este combo. Se notan los años de trabajo y la ilusión con la que han grabado este disco. Esperemos que signifique en su carrera un punto de inflexión importante y que sirva como excusa para verles en directo otra vez más. Siempre he considerado que esta gente merece algo más de repercusión de la que gozan. Si no me creéis asistid a cualquiera de sus conciertos y ya me contaréis…