Agro: Ritual 6

Hay bandas que además de ser insólitas, triunfan en lugares insospechados de poca o nula tradición metalera. Obviamente, no es culpa de nadie que estos chicos provengan de un lugar tan exótico para un europeo de a pie como Guateng, en la región del Noroeste calificada de nivel 1 y situada a pocos kilómetros de Botswana. Sabemos por referencias externas, noticias y demás informaciones procedentes de aquel país, que Sudáfrica tiene una importante colonia de habitantes blancos, con un estilo de vida mucho más elevado que el de resto de pobladores del continente africano.

Allí las diferencias socio-económicas son abismales. Y si es una ciudad como Johannesburgo puedes encontrar urbanizaciones de lujo y centro comerciales en un radio de cinco kilómetros, a pocos metros más allá y fuera del alcance de las alambradas  que rodean a este tipo de complejos, el mundo es muy diferente, y la pobreza y las infrahumanas condiciones de vida es lo que predomina en cualquier paisaje.

El caso es que desde 1992 una banda de metal, perteneciente a la primera clase de las analizadas, trata de mantener viva la tradición de metal rudo y potente. Ellos son AGRO, que tras cinco álbumes de estudio presentan este “Ritual 6´”. A caballo entre la escuela europea y la foránea, su metal es una buena muestra de que la agresividad y los riffs vertiginosos no son sólo propiedad de las grandes figuras germanas o escandinavas del momento. 

Herencia progresiva, toques de death y heavy metal y velocidad, mucha velocidad es lo que nos ofrece este quinteto con cara de pocos amigos. Hay tiempo para partes más complejas como es el caso de “10 x Over”, y también para pasajes más emotivos como los de “Time Heals Own Wounds”. Y si bien no podemos decir si a estos chicos les queda alguna herida por cerrar, lo que sí comprobamos es que tras haber tocado 500 conciertos en toda su carrera, incluyendo tours con bandas como NOCTURNAL RITES o actuaciones estelares en Wacken del año 2000 (no en vano su sello es el encargado de parte de la organización del festival germano) se puede decir que no son ningunos novatos y saben de qué va esto.

AGRO sin embargo tienen que luchar con la eterna carga del desconocimiento en los corrillos metálicos. Y esa es una lacra de la que no es fácil deshacerse. Aún así, a base de buenas canciones tratan de asomar la cabeza y saltar a una división superior.

Destaca la cantidad de apariciones que la banda ha realizado en actos benéficos y cristianos. Con lo que obviamos que se trata de una banda de metal cristiano, aunque las letras a priori no nos lleven a pensar en ello. Otra curiosidad son la clase de festivales celebrados es Sudáfrica. Desde el “Rock Against HIV” hasta el “Rock Against Drugs”. Poco originales en nombre, pero buenas iniciativas al fin y al cabo; o al menos eso podemos decir de la primera de ellas en la que creo que todo el mundo estará de acuerdo.

Así que para aquellos con espíritu aventurero y un tanto exótico, amantes de bandas como DARK AGE, DARK AT DAWN o formaciones capaces de mezclar heavy, power y death al mismo tiempo, AGRO representan una buena opción para añadir a su discoteca.