Thunder: Rip It Up

Un disco que sirve para que la banda vuelva a la carretera, haciendo fechas en varios festivales europeos y -concretamente en España- pasando por el Azkena Rock, el Rock Fest Barcelona y el Garage Sound. Tres oportunidades únicas para entender lo que es un verdadero concierto de rock en directo de la mano de unos Thunder que siguen estando en su mejor momento.

Dijeron que se iban y que no volvían, pero al final las bandas que realmente aman la música no saben quedarse quietas en casa. Siempre será mejor un planeta en el que Thunder están en activo grabando y girando que uno en el que no lo están, eso por descontado. Así pues, los de Danny Bowes y cia se han liado la manta a la cabeza y han vuelto a la actividad, primero con “Wonder Days” en el 2015 y ahora con un disco llamado “Rip it Up” que sigue mostrando a una banda de lo más continuista en su propuesta precisamente porque eso es lo que todos esperamos y queremos de ellos: rock de raíces setenteras con buenos ganchos melódicos que podamos recordar y directos llenos de energía.

Ver a Thunder en directo es una experiencia de las que te cambian la vida. Ya hace catorce años que, en una noche de sábado, pude verles ante un Astoria lleno en Londres y desde entonces no he visto nada igual sobre el escenario. No había artificios, ni pirotécnia. Solo un puñado de buenas canciones y una banda con energía. Pocas veces las bandas saben levantar a un gran recinto con el simple poder de un puñado de canciones.

“Rip it Up” es un ejemplo de como hacer rock honesto y de talante ‘stoniano’ en pleno año 2017, sin que eso tenga que ir reñido con la excelencia instrumental -algo que los propios Stones ya no están en capacidad de afirmar hoy en día. “No One Gets Out Alive” tiene un riff gamberro y positivo, mientras que “She Likes the Cocaine” se contonea peligrosamente como la chica que sabes que no deberías saludar en la discoteca porque solo te va a traer problemas. El propio tema título es derivativo del blues en su estructura más básica, pero con mas distorsión y una cadencia y acompañamiento de voces femeninas que terminan de coronarlo.

El disco tiene espacio para las baladas de cierta épica como “Right From the Start” o la Aerosmithiana “There’s Always a Loser”, pero la mayoría del trabajo es rock, puro rock, como diría el Mariskal Romero. La intro de piano de “The Chosen One” te hace pensar que estás ante un tema de Journey y, por momentos, lo puede parecer. Su patrón funk de batería la hace infecciosa y pese a no poseer el gran estribillo que uno espera durante todo el tema, es precisamente esa carencia lo que te engancha a la canción.

Un disco que sirve para que la banda vuelva a la carretera, haciendo fechas en varios festivales europeos y -concretamente en España- pasando por el Azkena Rock, el Rock Fest Barcelona y el Garage Sound. Tres oportunidades únicas para entender lo que es un verdadero concierto de rock en directo de la mano de unos Thunder que siguen estando en su mejor momento.