Biohazard: Reborn In Defiance

Curioso el caso de BIOHAZARAD en los últimos años. Después de unos cuantos cambios de sello a lo largo de su trayectoria, el grupo se tomó un descanso tras la salida de ‘Means to an End’, que duró dos años. En ese tiempo, Evan Seinfeld tuvo tiempo para seguir su carrera en el cine para adultos, participar en el reality  SuperGroup junto a Ted Nugent, Scott Ian, Sebastian Bach y  Jason Bonham, y crear THE SPYDERZ. Mientras, sus ex-compañeros hicieron lo propio con BLOODCLOT.

¿Un disco nuevo sin gira de presentación, para volver en 2008 por el vigésimo aniversario del grupo? Pues sí, volviendo al seno de la banda Bobby Hambel, pero ahí no queda la cosa. Este ‘Reborn In Defiance’ es un caso que recuerda al pasado; un nuevo cambio de sello (siendo este su debut con Nuclear Blast), grabando la formación original el disco (el primero en dieciocho años), para durante el verano pasado emitir el siguiente comunicado: “Mándanos tu música, vídeos, links y echaremos un ojo. Se requiere experiencia, así como la capacidad de comprometerse al 100% con la vida del músico y sus giras a tiempo completo, ya que el grupo estará ocupado durante 2012 y 2013. BIOHAZARD”.

Pues sí, la historia se repite en parte, porque este disco no tendrá presentación con el grupo que lo grabó, aunque por lo menos no se separan. Seinfeld  ahora tiene una nueva banda, Attika 7, y después de todo ese culebrón, ¿qué nos encontramos en el disco? Pues básicamente lo esperado de los que fueran reyes del hardcore. Hay grupos actuales que quieren recuperar la esencia de hace veinte años pasada por el filtro del tiempo. Otros, como BIOHAZARD, que entonces ya estaban activos, intentan acoplarse a estos nuevos tiempos; y a veces no es sencillo.

La producción de Toby Wright es impecable, y hace sonar al grupo mejor que nunca. Su contundencia sigue vigente en muchos temas, pero otros se difuminan en una pérdida de fuerza evidente. ‘Vengeance Is Mine’, ‘Come Alive’, ‘Never Give In’ y ‘Skullcrusher’ suenan a los mejores tiempos de los de Brooklyn, hardcore en estado puro de sus primeros años, directos al grano. Otras, aún más lentas y pesadas, como ‘Countdown Doom’ o ‘Waste Away’ también tienen ese punto de agresión tan característico. Canciones como ‘Killing Me’ o ‘You Were Wrong’, además de largas, se gustan en melodía; no por ello son malas, porque sobre todo la segunda tiene un toque oscuro muy atrayente. Hay muchos contrastes a lo largo de la hora que ronda este trabajo. ‘Reborn’ por ejemplo se queda un poco a medio camino entre todas ellas: empieza como un tiro, para después perderse en tres minutos de interludio para explotar de nuevo al final. Y ‘Vows Of Redemption’ empieza con un piano para después desmarcarse del resto de cortes y diferenciándose de casi todos ellos. Por un lado se agradece esa variedad, pero no estoy seguro de que sea lo esperado por parte de sus seguidores. Y para rematar un álbum distinto, ‘Season The Sky’, que no es sino una outro instrumental.

Desde que salieron han sido imitados, consiguiendo algunas de sus copias un éxito al que ellos no terminaron de llegar. Sin ser una maravilla ni un regreso por todo lo alto después de todos estos años sin editar nuevo material, ‘Reborn In Defiance’ es una vuelta digna. Su problema es el citado más arriba sobre la salida de gente que lo ha grabado después de haberse reunido; el primero en tanto tiempo, a la vez que el último. Raro.