Shaaman: Reason

Han pasado 5 años casi, desde que Andre Matos y compañía dejaron Angra para
formar Shaman por motivos referentes a “diferentes orientaciones musicales”
y editaron su fortuito primer disco “Ritual” con la correspondiente versión
en directo y el DVD del show en Sao Paolo. Eran muchas las expectativas que
teníamos algunos con este nuevo disco que no ha tenido mucha publicidad y me
temo que tampoco mucha aceptación.

Con “Reason” Shaman, ahora Shaaman por motivos de copyright, ha dado un vuelco
sustancial a su música. Andre Matos ha dejado de lado las flautas de Pan y los
instrumentos tribales para adornar los temas con los sonidos electrónicos de
Miro, como ya hizo Turilli en su compacto en solitario “Prophet of the las Eclipse”.
 Por otro lado deja el doble bombo power característico para temas veloces más
puntuales para jugar más con el medio tiempo y el corte más clásico en temas
como “More”. Además, vemos algunos toques progresivos, como ya vimos en el anterior
compacto, como cambios de ritmo y tempo, silencios puntuales…

El disco empieza con la potente “Turn Away” un tema fuerte con toques más clásicos
que se irán repitiendo a lo largo del compacto como parte del conjunto de nuevas
ideas del grupo. El segundo tema “Reason”, que da nombre al disco, es un tema
a medio tiempo bastante sencillo pero logrado, con alguna voz hablada por medio
y un estribillo pegadizo.

El disco tiene un aire más trágico, más sentimental, desde el sonido de la
música hasta los detalles del Artwork. Las letras han sufrido un cambio a su
vez, la baladita de corte happy del primer compacto: “Fairy Tale” con su “uoh
life is good, as good as a kiss” ha pasado a ser una tal “Innocence”, un tema
más sensiblero y de alguna manera tristón: “every day I see your face through
my intimate disgrace” nos dice éste… Los toques más potentes caen al final del
disco con verdadera caña en temas como “Iron Soul” o “Trail of Tears” donde
sí vemos la fuerza a la que los brasileños nos tenían más acostumbrados.

Como el ambiente que el disco exige es diferente al del primer disco requiere
un trabajo especial del “feeling” y  el sentimiento tanto en los riffs de guitarra,
ahora más clásicos y no tan rápidos y eléctricos, como en la siempre correcta
y eficaz voz de Matos, que en éste disco está más situada en sus medios-graves
en vez de el sus más característicos sobreagudos desgarrantes, que ahora caen
a cuenta gotas.  

Auque quizá no tenga la fuerza del primer disco ni temas tan  potentes como
“Pride” o “For Tomorrow” supone un cambio que quizá no guste a los fans de siempre
pero que rebosa calidad y buenas ideas. Un disco de transición quizá, pero un
buen disco, completo, con buenos temas y bien trabajado a nivel musical. Un
cambio quizá a peor pero que al menos supone un cambio y eso se agradece estando
como está el panorama power actual.