Paradise Lost estrena nuevo trabajo. Una remasterización de su álbum 'Belive in Nothing' de 2001. Una nueva versión de doce temas denominación de origen Paradise Lost.

‘Belive in Nothing’ verá la luz el próximo 29 de junio, una remasterización del octavo álbum de larga duración de los británicos Paradise Lost. No es la primera vez que queda patente el gusto por el detalle y la investigación musical por parte de los chicos de Yorkshire. Aunque son considerados una banda de gothic o doom, siempre han incorporado elementos como la electrónica u otros riffs que pueden sacarlos de estas etiquetas.

En esta ocasión, han querido reinventar su álbum lanzado en 2001, algo curioso. Normalmente, vemos remasterizar discos o grabaciones muy antiguas, cuya calidad no corresponde con la expectativa actual (aunque personalmente me gusta más la originalidad), pero no discos salidos hace apenas diez años. Sobre todo, porque fue uno de los trabajos más aclamados de la banda liderada por Nick Holmes. Tanto, que fue directo a parar al Top10 de las listas alemanas. Sin embargo ellos, siempre dejaron claro su insatisfacción con el resultado final, y es ahora cuando han conseguido tiempo para dar nuevas pinceladas a ‘Belive In Nothing’.

El viaje de Paradise Lost

Ya lo fue en 2001. Pero ‘Belive In Nothing’ es todo un viaje a través de la evolución y la inspiración de la banda británica. No olvidemos que nació nada más y nada menos que en 1988, y que les precede un larguísimo recorrido repleto de investigación y experimentación musical, cambios y direcciones.

Desde «I Am Nothing» hasta el último track, «World Pretending», tanto Holmes como Greg Mackintosh (guitarrista principal) quisieron describir y transformar en música los momentos más oscuros de la banda, y quizá no se vio representado aquello que esperaban. A continuación, Arya Blues os cuenta los detalles de esta reedición de ‘Believe In Nothing’ (Paradise Lost).

Atención a los detalles de Paradise Lost – Believe In Nothing

El álbum abre con «I Am Nothing», en cuya intro se nota claramente la remasterización. Los efectos electrónicos llevan más eco y profundidad, que al igual que «Mouth», más rockera presentan más consistencia en las nuevas versiones. La voz en cambio de esta última es mucho más volátil y fantasiosa, convirtiéndola en un tema que roza el gótico más puro.

«Fader» también conserva una intro muy similar, aunque es cierto que los sonidos brillan individualmente mejor en la nueva versión. La original ya es una obra de arte, sin embargo, disfrutar de un orden más claro, penetrante y directo nunca está de más. La nueva propuesta de voz, además, vuelve a acercar a la banda a un extremo más gótico y menos rockero. ‘Belive In Nothing’ continúa con «Look At Me now» seguida de «Illumination», otro tema que busca el acercamiento al gótico, la oscuridad y lo dramático. Una composición falta de esperanza en sus letras y riffs.

En «Something Real» se aprecian las mejoras en la percusión. Han introducido algunos efectos que evaporan mejor el sonido de la batería manejada por Lee Morris. Algunos de sus temas como éste, se crean con unas letras escasas que dicen exactamente lo que quieren decir, pero que sin el aderezo de una producción musical exquisita pueden sonar a vacías o típicas.

De ahí quizá, la insistencia de la banda de recrear y redimensionar la atmósfera necesaria para cada canción. «Divided» contiene una base muy electrónica y es una de mis favoritas, tanto en la versión original como la remasterizada. En la segunda, es ciertamente más sencillo introducirse en una historia que transmite paz y un viaje interior a través de las emociones subterráneas.

Mejor atmósfera y más profundidad

Quizá el tema más agresivo hasta el momento de este álbum sea «Sell It To The World». Bien es cierto, que en esta nueva versión han conseguido un comienzo más variado gracias a una nueva intro coral que se repite en el fondo a lo largo del tema. Una buena elección, de nuevo más coherencia con la banda y con el resto de los temas.

La sutileza vuelve después del anterior tema más colérico con «Never Again». La propuesta de este tema reconstruido es incluso más especial que el anterior gracias a la nueva incursión de un piano más oscuro y algunos toques de guitarra lejana (por no hablar de las cuerdas que también aparecían que la versión anterior) que contribuyen a crear de nuevo de lo que llevamos hablando toda la crónica: más profundidad, mejor atmósfera, más sinceridad y explicación.

«Control» y «No Reason» representan un tandem de los contrastes que siempre hemos visto en esta banda. La primera, efectivamente, más contenida y la segunda más rabiosa, algo que ocurre normalmente cuando se trata primero de hablar de uno mismo y segundo de hablar de situaciones externas, más de la sociedad o del sistema político.

Al igual que con la primera versión, el álbum cierra con «World Pretending» enteramente gótica que incrementa con los coros más graves. Aunque, en general esta nueva «Wold Pretending» está aderezada con un sonido más sucio y rasgado, que quizá crea cierto desconcierto cuando es el efecto contrario en todo el resto de las canciones del álbum. El nuevo ‘Belive In Nothing’ es una buena elección. Los cambios se han hecho con conciencia y mucha meditación y eso se nota. Es una versión mejorada (obviamente) del primer ‘Belive In Nothing’ de Paradise Lost en 2001. Menos rock, más fluido.

Grupo:Paradise Lost

Discográfica:Nuclear Blast

Puntuación:8

Canciones:

  1. I Am Nothing
  2. Mouth
  3. Fader
  4. Look At Me Now
  5. Illumination
  6. Something Real
  7. Divided
  8. Sell It To The World
  9. Never Again
  10. Control
  11. No Reason
  12. World Pretending

Año:2018-06-29

Votación de los lectores:5