Saint Deamon: Pandeamonium

Grata sorpresa la de esta peculiar agrupación nórdica de miembros alemanes y noruegos. Si ya su anterior debut “In Shadows Lost From the Brave” nos dibujaron una sonrisa en los labios y dieron síntomas de esperanza, con “Pandeamonium” consiguen ir mucho más allá de la corazonada. Practican una buena mezcla de hard-prog-power con estribillos de puño en alto que en ningún momento caen en el “más de lo mismo”, y eso ya es todo un mérito.

“Deception” os va a recordar a los Scanner más inspirados de mediados de los 90, con presencias de teclado y orquestaciones puntuales. Pero lo mejor del disco es sin duda los trabajados estribillos y la elaborada producción gentileza de todo un Roy Z y de Jens Bogren. Con tan rutilantes nombres ya dan pistas de que van más que en serio.

En su formación destaca la presencia de Ronny Miliancowicz (Axxis, Primal Fear) a la batería pero también el enorme trabajo de Jan Thore a las voces y de un inspiradísimo Toya Johansson a las seis cuerdas. Atención a los estribillos melódicos y a los riffs contundentes de “The Only One Sane” y el medio tiempo “Pandeamonium”, pues llegan al notable alto.

El disco engancha ya desde la primera escucha, es variado y resulta muy ameno pues las tareas de composición han sido trabajadas al milímetro. Las estructuras de los cortes son impecables y la banda suena moderna y sin pretensiones de imitar a nadie. En el riff contundente de “Eyes of the Devil” hay trazas de la producción oscura y contundente 100% Roy Z. Posiblemente el riff del disco que contrasta con un estribillo pausado y con unas líneas progresivas en las que se luce la base rítmica.

“Fallen Angel” tiene un arranque puramente de metal progresivo a lo Pagans Mind y otra estructura para quitarse el sombrero. Los coros envolventes la ensalzan y otra vez la labor del cantante es espectacular. “Oceans of Glory” posee un inicio sinfónico a teclado y es otro buen ejercicio de power prog dotado de otro gran estribillo.

Frescura, grandes ideas y discazo al canto. Dales una oportunidad a esta gente pues si en directo consiguen mantener lo apuntado en disco estaríamos hablando de una promesa en ciernes. Saint Deamon tienen muchos de los ingredientes necesarios para conseguir escalar muy arriba. Desgraciadamente supongo que será de esos discos que se quedan en exquisitez que saborean cuatro gatos.