Legs Diamond: Out On Bail

Mientras los clásicos LEGS DIAMOND (aunque el vocalista Rick Sanford se marchara
a principios de año) están grabando un nuevo disco de estudio, el sello Aor
Heaven se ha decidido a reeditar el viejo disco “Out On Bail”, o mejor dicho,
hacer un disco a base de un EP. Mientras que la versión original solo contenía
seis canciones (“Out On Bail”, “Fugitive”, “Walkaway”, “Find It Out The Hard
Way”, “Nobody’s Fool” y “One Way Ticket”), ésta reedición contiene versiones
adicionales de “Doomsday Flight” y “Seems Like a Dream” –con Dusty Watson a
la batería-. Ambos son temas extra grabados para otros territorios en la misma
época en la que se editó el disco (1984). Además, se incluyen tres temas inéditos
hasta el momento llamados “Radio”, “Hey Texas” y “One Last Kiss”, los cuales
no soy capaz de ubicar en el tiempo, aunque me huelo que son anteriores a la
edición original de “Out On Bail” (suenan bastante añejos).

Escuchar “Out On Bail” es toda una experiencia nostálgica. Algunos acababamos
de nacer cuando el disco salió a la venta y ciertamente –aunque el sonido del
disco no se conserva veinte años después –  es todo un viaje escuchar los seis
temas que incluía la version original del disco. Se trata de Hard-Rock macarra
de la época, con una voz definitiva para el estilo como la de Rick Sanford,
quien suena a cruce entre Rob Halford y el Brian Johnson de los primeros 80.
Temas como el homónimo “Out On Bail”, “Fugitive”, “Find It Out The Hard Way”
o “One Way Ticket” son verdaderos tesoros, donde la batería no es más que una
caja de ritmos Simmons programada por un colega de la banda.

El toque kitsch del disco viene cuando uno contempla la contraportada y ve
el pelo (a cada cual más gracioso) propio de los miembros de la banda, así como
la clásica portada de “callejón” tan tipica de la época. Sumémosle ese espíritu
ciertamente 80’s en el sonido de la banda  y obtenemos un producto realmente
capaz de transportarte a tiempos pasados sin demasiada dificultad, cuando todo
se reducía a ver a Saxon en el Palacio de los Deportes, salir de juerga por
los antros rockeros, ser contemplado con horror por tu vestimenta heavy y todas
esas cosas propias del año 1984. Daría oro por haber nacido quince años antes!