Kiko Loureiro: No Gravity

No cabe la menor duda que ANGRA, sin Kiko Loureiro, no hubiera sido una de
la bandas iconos en el heavy metal de los 90 y del nuevo siglo. Bueno…solo Kiko
no es participe, pero en combinación con el resto de miembros del combo brasileño,
si que se convierte en una pieza de fundamental e indiscutible importancia.
Ahora, parece ser, que ha encontrado un hueco en la ajetreada agenda a la que
su banda madre le somete, y tras 16 años componiendo temas instrumentales que
tienen a su amada guitarra como principal protagonista, por fin ha decidido
reunirlas previa selección, y publicarlas de la mano de la discográfica española
Arise Records.

Acompañado del hiperactivo Mike Terrana a la batería, Kiko Loureiro ha entendido
a la perfección que un disco compuesto en su totalidad por temas instrumentales
tiene que transmitir al oyente algo más que un compendio didáctico de guitarra,
que con toda seguridad, terminará por destinarse solo a los freakies del instrumento,
a los que se le pondrá dura ante tanto tapping, arpegios de complicada ejecución,
escalas menores a toda velocidad, y demás técnicas y características pertenecientes
al maravilloso mundo de las seis cuerdas.

Por supuesto que tal desparrame de técnica de refleja en este “No Gravity”,
que por otro lado forman parte de la belleza de todas las canciones que lo componen,
pero este señor natural de Sâo Paulo no se ha quedado aquí, a medio camino,
y nos sorprende con trece canciones cuya técnica propia de VAI, SATRIANI, MALCAPINE,
HOWE e incluso SANTANA, son meros elementos y mecanismos destinados a conseguir
una producción final, que no es otra que canciones con un total sentido del
ritmo y de la melodía. Y es que en este disco hay de todo, desde momentos speedicos
como en “Pau-De-Ara”, la inicial “Enfermo”, o la vertiginosa “Dilemma”; hasta
momentos de total reposo y relax como en “Tapping Into My Dark Tranquillity”,
o en los dos cortes finales “Feliz Desilusâo” y “Choro De Criança”, donde también
muestra su pasión y maestría por las guitarras acústicas, además de fundirse
con total naturalidad con sabores de la música de mestizaje tan usada también
en ANGRA. Además es capaz de evitar la linealidad con innumerables cambios de
ritmos y de ambientes a lo largo de todas las pistas, de transmitir al oyente
la ejecución de múltiples melodías sentimentales como si su guitarra fuera una
extensión de su cuerpo, y, en resumen, todas las características positivas que
puedas esperar de un guitarrista de tal calibre.

Personalmente no había oído un disco totalmente instrumental que me llenará
tanto, desde que mis oídos se mantuvieran en expectación con el “Passion And
Warfare” de STEVE VAI. “No Gravity” es el reflejo del talento de Kiko Loureiro,
un álbum completo, variado, dinámico, y que quitará el posible freno a tantos
oyentes que detestan los discos sin un vocalista al frente.