Valhalla: Nightbreed

Siendo conocedor de las andanzas de Jevo fuera de lo que es Valhalla, en sus proyectos y en su propia página web, uno no sabe cuando termina su faceta satírica y cuando empieza su trabajo serio. Valhalla es un proyecto serio que guarda en sus filas una de las personalidades más interesantes de la escena. El grupo es una sucesión de tópicos en lo musical, y en el factor letras tampoco es que se alejen mucho de lo que podemos encontrar en compactos como los de Majesty, Sacred Steel o Wizard. Los títulos ya hablan por si solos, pero, lo que decíamos anteriormente, yo ya no sé si es todo una gran broma.

Se han mejorado muchos aspectos respecto a su primer disco debut, aquel que se destacó tanto de quién era la portada y quién lo había masterizado. Valhalla son un claro ejemplo de uno de los males de esta generación actual de heavy metal. Muchas discográficas anuncian sus lanzamientos destacando al portadista y el lugar de masterización, En fin, ellos sabrán sus estrategias de márqueting, pero a mi no me parecen del todo acertadas. Nightbreed ofrece una compilación de temas de corte hímnico salpicado de clichés Manowar mas una fuerte influencia de la corriente centroeuropea conocida como metal alemán o power metal. La grata sorpresa la pone la voz de Patxa, que ha mejorado respecto a su disco debut y ha progresado en cuanto a la pronunciación de inglés se refiere. El doble bombo es constante a lo largo de temas como “Bigwigs” con guitarras dobladas y una línea vocal muy de puño en alto. Más hímnica es “Rebellion”, precedida por una intro muy a lo Gamma Ray. La cachonda “Raise Your Tankard” es de lo más lucido del álbum. Atención a la letra: 100% Jevo. La producción del disco es perfecta. Muy elaboradas resultan las composiciones que encontramos en el ecuador del disco: Las “Carpathian Tales”. Una dedicada a la Condesa Bathory y otra a Vlad Tepes el empaldor. Desgraciadamente son dos temáticas claras y recurrentes dentro de la escena metal internacional. La primera es un medio tiempo con bonitos fraseos de guitarra y algo de atmósfera oscura y la segunda recupera la velocidad manteniendo un riff muy marcado. Cabe mencionar que los coros han quedado bastante bien a lo largo de todos los cortes y son otro de los puntos fuertes del disco. La power ballad orquestal la pone “Dark Side Of Life”, toda una repetición de tópicos uno detrás de otro. El cierre cachondo viene de la mano de una versión de uno de los clásicos de los Village People en clave metalizada: “In The Navy”. Icluye un guiño a Popeye el marino y risas finales. Las alusiones a los Simpson son varias, pero destacan especialmente una de mis favoritas del gran Ralph Wigum.

El juego de ordenador que han incluido en el CD es un claro ejemplo de buen humor que siempre les ha caracterizado. Todo heavy debería echarse una partidita y ganarse el Valhalla, de verdad que vale la pena.

Si nos quedamos con lo estrictamente musical está claro que Valhalla son una banda más practicando el estilo de siempre, pero si leemos sus letras y nos impregnamos de la vena satírica y cachonda que siempre les ha caracterizado, está claro que, dentro de la escena nacional, tienen suficiente atractivo. Aunque puede que mucha gente no vea en ellos más que la enésima banda fotocopia apta para los paladares más “true”.