Edguy: Monuments

Están todos los hits conocidos y sirve como submarino para sumergirse en la carrera del grupo pero tienen muchas más canciones dignas de aparecer en un lanzamiento así y que por cuestiones de espacio han quedado fuera.

La carrera de Edguy es, a juzgar por lo que presentan en el recopilatorio “Monuments”, una de las más consistentes del heavy metal y el hard rock europeo. No es ninguna sorpresa: quienes venimos siguiendo la carrera de los de Fulda desde hace un par de décadas hemos sido testigos privilegiados de la mutación de Edguy de grupúsculo de power metal al uso hasta convertirse en uno de los destacados de su generación para luego evolucionar en una solvente banda de heavy rock de sonido moderno y estribillos imbatibles. No solo eso, por el camino nació una idea como Avantasia que consiguió popularizar las operas-metal y también consiguió ir un paso más allá para seguir adelante cuando todos los demás copaban el mercado haciendo esencialmente lo mismo. No cabe duda de que todo lo que envuelve a Edguy brilla y gran parte del motivo es la genialidad manifiesta de Tobias Sammet, pero sin olvidarnos de sus sufridos compañeros de banda. Una de las cosas que separan a Edguy del resto de bandas es su capacidad para mantener su formación inalterada a lo largo de todos estos años: cinco amigos de adolescencia que consiguen su sueño juntos y permanecen juntos a lo largo de todo el camino.

El legado musical que nos dejan hasta la fecha es tremendo y eso teniendo en cuenta que “Monuments” es un recopilatorio donde se echan de falta muchas canciones. Están todos los hits conocidos y sirve como submarino para sumergirse en la carrera del grupo pero tienen muchas más canciones dignas de aparecer en un lanzamiento así y que por cuestiones de espacio han quedado fuera. En compensación, la banda nos ofrece cinco nuevas canciones de estudio. Según parece, debían ser dos y se terminaron animando en el estudio. Una muestra de una banda que aún funciona creativamente hablando y que no tiene signos de cansancio aún. Los temas, que abren el recopilatorio, son variados. Desde el toque algo más oscuro y misterioso de “Ravenblack”, que no quedaría nada mal en un disco de Avantasia, hasta el power metal de la vieja usanza en “The Mountaineer”, el grupo ofrece en sus nuevos temas un auto-repaso por sus propios estilos compositivos visitados a lo largo de los años. “Open Sesame”, por ejemplo, es un tema que cuadraría perfectamente en “Rocket Ride” o “Tinnitus Sanctus”. “Wrestle the Devil” es más cercano al material de “Space Police” y “Landmarks”, con sus juegos de guitarras dobladas y su doble bombo a la velocidad de la luz podría formar parte de «Vain Glory Opera” o “Mandrake”. Puede que cautiven o que se conviertan en los típicos “extras de recopilatorio” que a nadie le vuelven a importar nunca más, pero madera tienen. Y, como decíamos, si eso es una muestra de lo que está por venir en el próximo trabajo de la banda, podemos estar tranquilos acerca del futuro.

Sobre la selección de “Monuments”, como decíamos, es adecuada pero se echan de menos canciones. Es obvio que el grupo ha querido correr un tupido velo respecto a su primerísima época (de “Kingdom of Madness” no hay ninguna selección y entre “Vain Glory Opera”, “Theater of Salvation” y “Savage Poetry” apenas suman cinco temas) y han representado con mayor ahínco todo lo que hicieron de “Hellfire Club» en adelante, cuando terminaron de encontrar su sonido más adulto. El disco que les llevó de una época a otra, “Mandrake”, tan solo cuenta con una selección representada, la necesaria “Tears of a Mandrake”. Es obvio que tienen que estar “King of Fools”, “Superheroes”, “Ministry of Saints”, “Judas at the Opera” o “Land of the Miracle” pero luego sorprenden con inclusiones como las de “Holy Water” o “Spooks in the Attic”, que formaron parte de EP’s y no son “titulares” de ningún disco completo de la banda.

En definitiva, un repaso extenso e intenso por la carrera más fructífera que ha dado una banda europea de heavy rock en el último par de décadas. Si Edguy no encabezan festivales hoy en día es porque Avantasia les robaron el lugar, pero al final, todo queda en casa.