Han pasado más de 40 años de su debut y siguen demostrando que siguen reinando en el mundo del heavy metal. Hay grupos cuya música siempre quedará para la historia, y BLACK SABBATH es uno de ellos.

Dos minutos. Sólo dos minutos son suficientes como preámbulo para meternos de lleno en el universo BLACK SABBATH. En ellos condensan la llegada del grupo a Melbourne, su traslado al recinto, el saludo de Tony Iommi a Joe Perry de AEROSMITH (justo antes de comenzar el concierto se le ve atento junto a Steven Tyler tras la mesa de sonido), el calentamiento de cada uno por separado en su camerino, las declaraciones de algunos asistentes (que van con la familia al completo)… y el momento de poner a todo el mundo con los pelos de punta a ritmo de los acordes de ‘War Pigs’ con las sirenas de fondo. Todo eso, lo dicho: en menos de dos minutos, sin rastro de Tommy Clufetos, que que no sale hasta que empieza a aporrear la batería.

No entraré a debatir los retoques digitales del directo, puesto que todos sabemos que hoy en día son algo habitual, y seguramente este DVD no será una excepción. Pero es que sus puntos a favor son constantes. La sobriedad de Tony Iommi sobre un escenario es de las que son dignas de admirar. La de Geeezer, exactamente igual. A eso hay que añadir que si uno es un referente para todos los guitarras que vinieron detrás de él, el otro personifica la importancia de un buen sonido de bajo que tan tapado está quedando según avanza el tiempo en producciones artificiales. Aquí todo suena puro, y a ‘13’ me remito: es una gozada escuchar las líneas de Butler en su último álbum. Ha sido uno de los mejores trabajos de 2013, y prueba de la esencia Sabbath la tenemos en lo bien que ensamblan los temas interpretados con los clásicos, como ocurre al principio con ‘Loner’ entre ‘Into the Void’ y ‘Snowblind’. Casi nada. O más adelante, ‘Methademic’, que es incomprensible el motivo por la que la dejaron fuera de ‘13’ para incluirla sólo en su edición especial.

Ozzy es caso aparte. Sus carreras encorvado que parece que en cualquier momento va a caer, su expresión de satisfacción al notar que el público hace todo lo que dice (la parte central de la mencionada ‘Snowblind’ es un buen ejemplo) le siguen haciendo único. Eso por no hablar de la cara de madman que nos ofrece en casi todo momento, con especial mención para el momento ‘Black Sabbath’. Es increíble que siga sonando tan tétrica y misteriosa tanto tiempo después, y lo mismo se puede decirde ‘N.I.B’, ‘Behind the Wall of Sleep’ o ‘Fairies Wear Boots’. Entre ellas, uno de los riffs de riffs, el de ‘Symptom of the Universe’, tras la que dejan espacio a Cufletos para un solo de batería, que enlaza directo con los acordes de ‘Iron Man’. La unión del ayer y el hoy del grupo se evidencia en el tramo final, ensamblando de manera natural ‘End of the Beginning’ (con esa atmósfera ‘Black Sabbath’ perdurando en el tiempo) con ‘Children of the Grave’. Aunque todo hay que decirlo, el movimiento de abanico de Ozzy en la primera no enganchan al público como con los primeros temas de la noche, y los saltos del cantante en la segunda sí consiguen su cometido y hacen botar a la gente. Lógico, si tenemos en cuenta que el álbum salió mes y medio después de la grabación. Sin parar, ‘God is Dead’ enfila el cierre hacia los compases de ‘Sabbath Bloody Sabbath’, que cortan para empezar con ‘Paranoid’, como no podía ser de otra manera, con las miradas cómplices de sus miembros y las sonrisas de todos ellos muy presentes. Que no se pierda nunca la magia (negra).

No necesitan grandes alardes, con un escenario igual de sobrio que ellos, con una pantalla trasera no excesivamente grande, además de su logo en los laterales y las cruces siempre presentes en los amplis. ¿Para qué más? Sus himnos ya hablan por sí solos. Y si no, tenemos el segundo DVD, con tres temas adicionales, ‘Under the Sun’, ‘Dirty Women’ y ‘Electric Funeral’. También una entrevista al trío, bastante escasa, de cuarto de hora de duración, en la que repasan la decisión de hacer un nuevo disco, la de tocar canciones nuevas, la savia nueva a la que atrae su música, la diferencia de épocas en la que han editado sus distintos discos o los rituales antes de salir a escena. Todo con muy buen rollo entre ellos, y un contraste brutal entre el negro del que visten todos y el blanco del lugar donde son entrevistados. Aunque para escaso y corto, el ‘Show Day’, no llega ni a diez minutos, que no es más que la intro del primer DVD alargada y con comentarios, preparando el show. De haber sido todo de mayor duración, hubiera sido perfecto.

Han pasado más de 40 años de su debut y siguen demostrando que siguen reinando en el mundo del heavy metal. Hay grupos cuya música siempre quedará para la historia, y BLACK SABBATH es uno de ellos. Aunque nos pese, viendo cómo ha sido su historia y los últimos acontecimientos por los que ha pasado alguno de sus miembros, hay que ser realistas: el final está cerca. Hasta que llegue, esperemos que nos visiten una última vez. En ese momento, será “the end of the beggining”. Terminará su carrera y empezará su legado.

 

Grupo:Black Sabbath

Discográfica:Vertigo

Puntuación:9

Canciones:

  1. Warpigs
  2. Into the Void
  3. Loner
  4. Snowblind
  5. Black Sabbath
  6. Behind the Wall of Sleep
  7. N.I.B.
  8. Methademic
  9. Fairies Wear Boots
  10. Symptom of the Universe
  11. Iron Man
  12. End of the Beginning
  13. Children of the Grave
  14. God is Dead?
  15. Sabbath Bloody Sabbath’ (intro) / ‘Paranoid

Año:2013-11-26

Votación de los lectores:5