Subway To Sally: Kreuzfeuer

Con este último trabajo de los Sally va a pasar lo que me suele pasar habitualmente con sus ediciones más recientes; que todo esta bien, no le encuentras el punto y lo consideras siempre inferior a los otros, pero… que con el tiempo, ves que hay auténticos temazos y que valía mucho la pena. En sus últimas obras suenan más lúgubres y oscuros, algo curioso pues sus clásicos más celebrados son los más festivos, aquí siguen esa vía, pero quizá se adentran mucho más en el folk medieval.

Evidentemente queda lejos de sus obras más excepcionales de sus inicios, donde casi podemos decir que inventaron un estilo. Ahora ya hay miles de imitadores, y aunque lejos de sentar cátedra como antaño, siguen siendo capaces de pasarle la mano por la cara a la mayoría de aprendices que ven en el folk del medievo un filón de moda.

Fish se sigue manteniendo como líder absoluto, y la banda sigue llevando a cabo composiciones excelsas con coros, pasajes instrumentales muy logrados y estribillos para el recuerdo. Esta particular orquesta mantiene algo de su pasado disco acústico con la balada “Versteckt”, a violín, acústica y con la voz de Eric brillando con su personalísmo buen hacer. Casi casi recita más que canta.

Atentos a “Aufstieg” pues va a quedar como fija para sus próximos conciertos. Directa, poderosa, con un gran riff y el apoyo protagonista de la sección más medieval. Siguen repuntando su folk con guitarrazos eléctricos en “Judaskuss” aunque suena a ya escuchado en anteriores entregas. Este es uno de los principales problemas del presente disco, y que de hecho ya lo era en su pasado “Bastard”, hay mucho material que te parecerá haberlo oído en anterioridad.

“Einsam” es otra de las fijas para sus próximos conciertos. Un medio tiempo pausado pero con un riff excelente e incluso bailable con esos coros tan efectivos que consiguen. “Die Jagd” te la puedes imaginar en directo con fogonazos de fuego a cada golpe de riff. Ideal para el directo y muy representativa de esta última época de la banda. Se mantiene a medio tiempo, oscura pero a la vez melódica.

Los ritmos pausados vienen de la mano de cortes como las elaboradas “So Fern, So Nah” o “Vater”, con apoyos de cuerda y orquestaciones, pero se agradece más cuando toman tempos más rápidos. Dando colorido y demostrando sus muchas posibilidades hay “Komm Inn Meinen Schlaf”, balada cantada a dúo entre Eric y una invitada femenina.

La banda ha subido como la espuma, ha cerrado Wacken durante varios años, están en Nuclear Blast y hasta encabezarán una gira española como cabezas de cartel. Eso sí, siempre cantando en su alemán patrio, más mérito que nadie, pues estaban incluso antes del fenómeno Rammstein. El disco no decepcionará a sus seguidores más acérrimos y sorprenderá a quienes no les conozcan, pero aquellos que esperen la calidad de sus primeros tiempos, o que supere a sus últimos tres discos… quizá se lleven una desilusión. Gran banda, eso sí, algo estancada.