Ya se sabe que a cada trabajo todos los grupos nos intentan vender su álbum como el mejor que han hecho. KORN no es una excepción, y hace escasamente un año Jonathan Davis así nos lo hacía saber en una entrevista para esta web. Una vuelta a sus raíces más crudas y duras… o eso decía. La verdad es que las piezas parecían encajar. Desde ‘Untouchables’ se habían dedicado a experimentar con atmósferas más oscuras, sonidos cercanos a lo electrónico en su anterior ‘Untitled’, y ahora volvían con Ross Robinson, productor de sus dos primeros discos, la portada recordaba a aquellos años, y fichaban por Roadrunner. De hecho, nunca les gustó demasiado la maldita etiqueta nu-metal; ellos simplemente hacían lo que querían, y alguien tuvo la idea de colgarles esa definición, tan usada después indiscriminadamente.

Pero a veces las piezas no encajan como deberían, y al menos para mí, KORN pierde mucha credibilidad con este disco, empezando por el título. ¿‘Korn III: Remember Who You Are’? ¿Resulta que ahora hay unos cuantos discos suyos que no valen, y los desechan considerando que este sea el tercero? Vamos, que la experimentación durante estos últimos años no ha servido para nada, y han decidido volver al sonido de su debut… si es que fuera así realmente. Porque aquí, ni sonido del debut ni nada. Si había algo bueno en ‘Korn’ y ‘Life is Peachy’ fue su sorpresa, la irrupción del grupo dentro del panorama musical (apoyada por la gran campaña de publicidad que tenían detrás). Ese efecto sorpresa ahora no es posible, y aquel sonido quedó enmarcado en sus primeras obras; y sus composiciones actuales distan mucho de aquellas.

Unas cuantas escuchas a este ‘tercer disco’ para recordar quienes eran, y si quiero hacerlo recurro a sus discos citados más arriba. Porque al fin y al cabo, los discos antiguos están para recordarlos, y para tocarlos en directo; y si quiero escuchar el sonido de Korn en 1994, me pongo su debut. Si por otro lado quiero escuchar algo más experimental, me pongo ‘Untouchables’, o alguna de sus obras posteriores. Porque para mí, y para mucha otra gente, KORN son un grupo más allá de sus dos primeros discos. Y su apuesta posterior pudo salir o peor, convencer más o menos, pero parece que a ellos no les ha terminado de satisfacer.

No han sido pocas las escuchas antes de ponerme a escribir, para evitar juicios rápidos, pero es que el disco sigue sin entrar y convencerme. De hecho, soy casi incapaz de nombrar los mejores momentos de él, ya que se llega a hacer aburrido y lineal. No me extraña que ‘Oildale (Leave Me Alone)’ fuera el single elegido como adelanto, porque es de las pocas que se salva. Riffs pesados y la inconfundible voz de Jonathan Davis… pero esto no es una vuelta a las raíces. Seguramente era la peor de las declaraciones que podían hacer, para crear falsas esperanzas. Hay muchas maneras de hacer promoción de un disco, sobre todo después de que tus últimos trabajos no tuvieran la cogida esperada, pero esto… se les fue de las manos.

‘Pop A Pill’ es otra medianamente salvable, pero es una mala noticia que las dos canciones más destacadas estén juntas y encima al principio del álbum, con lo cual lo demás se hace muy cuesta arriba. De hecho, no es hasta casi el final con ‘Are You Ready To Live?’ que vuelven a captar un poco de atención, o antes en algún momento puntual de «Let The Guilt Go» o ‘Move On’, de las pocas pegadizas. Entre los demás cortes, alguno de los gritos de Davis resultan artificiales y forzados, el bajo martilleante de Fieldy no es como antaño, y las guitarras… pues no convencen. Perdón, quise decir la guitarra de Munky, ya que es el único que la toca en estudio, y siguen teniendo en el escenario en un segundo plano a otro al que apenas se ve. Menos mal que el bueno de Ray Luzier es ya un miembro oficial de la banda, porque le veía tocando la batería tras un telón… Y hablando de él, si hay algo de interés en este disco es su labor, muy por encima de la de sus compañeros.

Si querían volver a las raíces, que sigan recuperando temas olvidados para tocar en directo; y que de este ‘III’ toquen las justas y necesarias. Porque hay casos en que los discos nuevos son la mejor excusa para salir de nuevo de gira. Este es uno de esos casos, y dudo que ninguno de estos temas aguante el paso del tiempo de aquí a pocos años. En cualquier caso, vuelven a dar que hablar, y a buen seguro con disparidad de opiniones.

Varo (varo@themetalcircus.com)

Grupo:Korn

Discográfica:Roadrunner Records

Puntuación:3.5

Canciones:

  1. Uber-time
  2. Oildale (Leave Me Alone)
  3. Pop A Pill
  4. Fear Is A Place To Live
  5. Move On
  6. Lead The Parade
  7. Let The Guilt Go
  8. The Past
  9. Never Around
  10. Are You Ready To Live?
  11. Holding All These Lies

Año:2010