Pink Cream 69: In10Sity

PINK CREAM 69 son conocidos, entre otras cosas, por ser la banda de la que salió el que hoy en día es vocalista de HELLOWEEN, Andi Deris. El conocimiento de muchos fans se limita a ese hecho concreto que no dejaría de ser anecdótico si no fuera porque realmente Andi Deris se pasó seis o siete años en la banda antes de pasar a formar parte de HELLOWEEN. Con él editaron grandes discos como el mítico “One Size Fits All”, pero la carrera de la banda ha seguido mucho más allá de ese hecho. El pobre David Readman, que lleva ya más de una década en la banda aún está aguantando las comparaciones. Algo así como lo que le pasa a Andi Deris respecto a Michael Kiske en HELLOWEEN. El karma es así, quizá.

Tras un periodo de descanso desde “Thunderdome”, ni más ni menos que tres años, PINK CREAM 69 vuelven ahora a la palestra con un disco que es más de lo mismo de siempre, pero con la ventaja de que se han vuelto algo más apetecibles tras tres años fuera de juego. El motivo principal ha sido la enfermedad de su guitarrista Alfred Koffler, quien ahora graba el nuevo disco apoyado por Uwe Reitenauer. La mano izquierda de Koffler no está operativa al 100% pero eso no le ha impedido ofrecer un buen montón de riffs con el sabor típico de PINK CREAM 69 a lo largo de los 13 temas que componen este “In10Sity”, el cual sirve para celebrar el décimo aniversario desde la entrada de David Readman en la banda.

Los temas que componen el disco son predecibles, aunque no están exentos de calidad. Canciones como “Stop This Madnes” o “I’m Not Afraid” son tan típicas de la banda que podrían haber formado parte de cualquier disco anterior. Hay material destacable como la casi AOR “Crossfire” o la melódica “Desert Land”, de apenas un minuto y medio de duración. Otras como “Out Of This World” son tan heavies que cuesta identificar a la banda, y de hecho, la voz de Readman consigue un cierto parecido con la de Rob Halford en los tonos más agudos.

El himno rockero de turno viene de la mano de “Wanna hear You Rock”, un tema que se puede colocar facilmente al lado de “Break The Silence”, “Shattered Prophecy” o “Trust The Wiseman”. No es exactamente el mejor tema de la carrera de la banda, pero si que tiene la propiedad de hacer que le prestes atención.

En lineas generales se trata de un disco algo lento, de los que tarda en gustar. Es más, de los que no sabes si después de varias escuchas realmente te acabará gustando. Probablemente son horas bajas para la banda, porque lo que si que está claro es que desde “Sonic Dynamite” y “Endangered” no han hecho nada excesivamente destacable.