77: High Decibels

Nacidos al amparo de una época en la que AC/DC han vuelto a ser una banda plenamente vigente tanto en círculos rockeros como más mainstream, ’77 capturan perfectamente la esencia del sonido australiano que popularizaron los hermanos Young desde mediados de los años ’70 y que a día de hoy sigue llenando estadios en todo el mundo durante enormes giras de tres años de duración. Y si bien AIRBOURNE hacen uso de ese sonido “Young” en sus guitarras, su propuesta es mucho menos fidedigna que la de estos catalanes. AIRBOURNE captan el sonido pero le dan un barniz distinto y, en ocasiones, casi risible. Pero lo de ’77 es un homenaje tan sentido que uno se olvida totalmente de cualquier cuestión referente a la originalidad compositiva y todo ese rollo para críticos aburridos. Señores: el solo en crescendo de “(Gotta Go) Gotta Hit The Road”, con maracas de fondo, recuerda perfectamente al de “Problem Child” del “Dirty Deeds Done Dirt Cheap”, con un riff malicioso que recuerda al “Overdose” del “Let There Be Rock”. ¿Y QUE? Vas a acabar saltando como un capullo y deseando que el futuro del rock and roll esté en manos de estos tipos y de otros como ellos.

Para “High Decibels” la banda se ha ido a grabar a la tierra del rock and roll, que no es ni el Reino Unido y Estados Unidos…ni siquiera Australia. Se han ido a Estocolmo, donde se pasaron el mes de abril de 2011 grabando en los Gutterview Recording con la producción de un fuera de serie como Nicke Andersson, que de rockear sabe un rato y de AC/DC otro raro.

El sonido que consigue la banda es un cruce entre la dejadez sónica del “Dirty Deeds” y la definición bienintencionada de “Powerage”. No tienen nada, absolutamente nada, que envidiar a los mejores tiempos de AC/DC y se esfuerzan en calcarles con ahínco. Los temas más bluesies como “Are You Ready For Rock And Roll” tienen esa cadencia pegajosa que solo se consigue en un estudio con cerveza caliente tirada por el suelo.  El juego con el tempo al inicio de “This Girl is On Fire” es otro detalle clásico y el tema  es absolutamente imprescindible. La rítmica “Let’s Beat it Up” comienza con LG Valeta marcando el tempo con un leve rasgueo de sus cuerdas al estilo del inicio de “Back in Black”, otro de esos detalles que solo los fans de verdad de AC/DC sabrán captar. Referencias como “Backdoor Man” (“I’ll be your backdoor man” de la letra de ”Dirty Deeds Done Dirt Cheap”) hacen de los discos de ’77 un auténtico trivial de AC/DC para cualquier fan, aunque probablemente la intención de la banda es que en un momento u otro se les tome como un ente creativo independiente de AC/DC. Pero es muy complicado, pues ellos mismos ponen todas sus ganas en copiar detalles musicales y líricos. ¿Puede que en el futuro encuentren su propio camino lejos de la copia? Espero que no. Porque suenan más a AC/DC que los propios AC/DC hoy en día. Así que, para un gustazo que nos podemos dar, que no nos lo quiten. ¿Lo siguiente que será? ¿Follar con condón? ¿Beber cerveza sin alcohol? ¿Conducir con carnet? Venga, hombre…