Crystal Ball: HELLVETIA

Desde  Suiza nos llega el último trabajo de CRYSTALL BALL que lleva por título “Hellvetia”. Su formación data de 1995 pero aún no se han hecho un hueco importante dentro de la escena del rock melódico, a pesar de que practican un sonido muy comercial y digerible. Sus tres trabajos anteriores ya les dieron cierta notoriedad, sobre todo en su país, y les convirtieron en teloneros de bandas de la talla de DOKKEN, PRETTY MAIDS o GOTTHARD entre otros. Quizá sea con “Hellvetia” cuando den el salto definitivo ya que cuenta con las claves del éxito en todo grupo de este estilo que se precie: estribillos pegadizos, riffs guitarreros y una voz carismática, en esta ocasión a cargo de Mark Sweenney.

El disco destila optimismo por los cuatro costados, conserva en esencia ese sonido de bandas propiamente de los ´80 pero coquetea sutilmente con el Power Metal en su cara más melódica. Con todo resulta una obra compacta, donde los coros cobran una vital importancia para dar sentido a las composiciones.

El disco se abre con “Hellvetia”donde destaca una intro al más puro estilo “tirolés” que da paso a un tema un tanto repetitivo que sirve para acercarnos al sonido de este grupo.

CRYSTAL BALL puede equipararse a muchas otras bandas, por las que probablemente estén influenciadas. Yo destacaría sobre todo PRETTY MAIDS, basta escuchar “Want it all” o “Mysery needs company” para darse cuenta. Su vocalista muestra unos registros muy similares a Mike Tramp de WHITE LION, sobre todo en la hardrockera ”My life”. Como mejor tema del disco destacaría”One day at a time” por su base rítmica de guitarras y su estribillo desgarrador donde la voz de Sweenney se pone al límite.”Bird on a wire” recuerda mucho al sonido de DOKKEN y, como en el resto de composiciones, los coros resultan el broche perfecto para unos temas bien elaborados y llenos de fuerza.

En definitiva una banda que sin inventar nada nuevo sabe sacar partido a su estilo para no resultar una simple copia de los grupos de siempre. Si no los conoces aún tal vez haya llegado el momento de hacerlo, ¿no crees?