Exodia: Hellbringer

¡Precaución! Detrás de esta brutal portada vais a encontrar 10 cortes de un thrash metal afilado y directo a vuestra cara. Los valencianos Exodia han publicado este año «Hellbringer», su segundo álbum de estudio, y lo cierto es que la mejoría respecto a su obra prima es verdaderamente notable. Nos encontramos ante un trabajo más complejo y elaborado que aquel «Slow Death» de 2012, pero sin perder la identidad que los definió en ese primer momento.

La agresividad sigue desbordada, y la adrenalina encuentra su lugar en los veloces riffs que acuchillan nuestros altavoces de la mano de Pablo y Rafa, pero todos sabemos que la banda ya contaba con esto en el álbum anterior. Entonces… ¿Qué es lo que hace que «Hellbringer» sea tan superior? Pues sin ninguna duda, el hecho de que en esta ocasión hayan decidido trabajar muchísimo más las secciones instrumentales. Buena cuenta de ello dan temazos como «Wicked Seed» y «Shout the Nations», donde, además de tener ritmos de infarto y endemoniadas voces, encontramos pasajes interesantes con medios tempos, memorables melodías y grandes solos.

Otro aspecto que ha mejorado con creces es el de los estribillos, que se han convertido en uno de los puntos fuertes de las canciones. «Anesthetics», personalmente mi tema favorito del disco, es el mejor ejemplo de ello, junto al primer corte del álbum. Han sabido encontrar un equilibrio muy logrado entre la emotividad de ciertos pasajes y la caña burra que nos ofrecen en otros momentos. Gracias a esto y a lo anteriormente mencionado, el gran punto a favor de este «Hellbringer» es que la banda ha sabido hacer una música más variada y menos monótona que la que presentaban un par de años atrás. Ojo, no quiero decir con esto que «Slow Death» fuera un mal disco, sino que con esta nueva entrega han sabido crear canciones más interesantes, que ofrecen muchos más matices que apreciar a lo largo de varias escuchas.

En honor a uno de los personajes más carismáticos de la escena thrash de Barcelona tenemos la explosiva «150% Attitude», con unas influencias más cercanas al crossover en los versos que le dan un toque distintivo. Una de las pocas quejas que tengo con este trabajo es que no me acaban de convencer las voces dobladas del estribillo de «Go!», pero esto se convierte en un mal menor comparado con lo que aporta una joya como «Infected Hate». En «Future Generations» la banda toma un tono algo más dramático, con un lento inicio y unas sentenciadoras guitarras. Sin duda, otro de los highlights de este «Hellbringer», que con la divertida «The Art of Drinking» cierra sus 47 minutos de tormenta sonora. Un estupendo trabajo que los coloca varios escalones por encima y augura un buen futuro para los levantinos. Esperamos que con el tercer álbum sigan progresando, ¡mientras tanto toca disfrutar de este gran disco!