Anciients: Heart of Oak

ANCIIENTS son una banda canadiense formada tan sólo hace 4 años en Vancouver que nos presenta en este mes de abril su primer álbum, “Heart of Oak”. Tras una primera escucha y tras echar un ojo a la cronología de la banda, uno podría pensar que esta debe ser una de esas bandas recientes formadas por miembros de otras agrupaciones más experimentadas como pasa con HOLY GRAIL, pero sorprendentemente no es así. Su bajista ha estado de gira con 3 INCHES OF BLOOD, pero nada más.¿Por qué digo esto? Porque tan sólo con una primera revisión, nos podemos dar cuenta de que este debut es sin duda más sólido y más sobrio que cualquier tercer o cuarto álbum de algunas otras bandas, lo cual es tremendamente sorprendente y gratificante.

Pero comencemos por el principio. ¿Qué tipo de música hacen ANCIIENTS? Se trata de un metal progresivo alejado del estándar virtuoso que categoriza a una parte de este género, y se acerca al otro grueso de bandas de prog metal menos centradas en demostrar cuántas notas pueden tocar por segundo y lo buenos que son con sus respectivos instrumentos. Beben directamente de las aguas de MASTODON, ENSLAVED y BARONESS, con la contundencia sonora que caracteriza a estas bandas y el tratado vocal de los dos primeros mayormente, conformado un bloque en el que brilla el conjunto sobre el individuo, al contrario que en las bandas de nuestra particular anterior categorización. Si bien como ya hemos dicho el disco destaca por su robustez compositiva, también es cierto que cabe reprocharles una excesiva influencia de las bandas mencionadas (podrías meter alguna de las canciones menos duras del genial RIITIIR de ENSLAVED entre los temas de este disco y cuajaría, aunque evidentemente no son su única inspiración), lo cual va en deterioro de la propia identidad de la banda y resta puntos a la hora de valorar el disco en sí. Su principal punto fuerte, como ya hemos dicho, es la robustez y la cohesión de éste, muchas veces impropia de un álbum debut. Pero esto no quiere decir que sea perfecto o que deba ser una referencia en cómo la banda tiene que sonar de cara al futuro. Compositivamente han logrado un trabajo realmente interesante, un estupendo primer paso (sin contar el anterior EP) que debe servir como escalón para llegar a un nivel superior que les ayude a desmarcarse de la excesiva influencia de ciertas bandas. Si realmente quieren evadir esa etiqueta de “clon” que hoy en día tanto vemos en géneros muy dispares, deberán comenzar a indagar en otros sonidos o fórmulas, lo cual no implica necesariamente desprenderse del perfume de este primer álbum, el cual no deja de ser una carta de presentación tremenda.

El disco puede presentarse monocromático en cierta manera, pero una escucha atenta nos revela que pese a su solidez y quizá excesiva homogeneidad (un primer término positivo y un segundo con una pequeña connotación negativa para un servidor) encontramos algo que brilla y que podría marcar una línea distintiva. Ese “algo” es el último tema del disco, “For Lisa”, que si bien no se aleja estratosféricamente del resto del álbum, da un pequeño giro final a la tónica general que deja con muy buen sabor de boca al oyente, haciendo que haya una gran esperanza y expectativa de liberación de las cadenas de cara a su siguiente trabajo. Este tema instrumental es un soplo de aire fresco y da un toque de personalidad al álbum después de ocho canciones (bastante largas por cierto) realmente buenas pero sin un toque de originalidad que las diferencie entre ellas. Cuidado, no estoy diciendo que para que un álbum sea muy bueno todas las canciones tengan que ser extremadamente diferentes, al contrario. Un buen álbum tiene que tener una base de constancia, pero a la vez, requiere que cada canción tenga un toque personal que la diferencie ligeramente del resto. Y esto sucede con “For Lisa”, sin duda el mejor tema del álbum pero seguido por las rocosas “Giants”, “Falling in Line” y “Flood and Fire”.

Dejando de lado ese asunto, no podemos pasar por alto las innegables cualidades de la composición y ejecución del álbum. Encontramos un genial tratamiento vocal, aderezado con un dramatismo moderado que aparece aquí y allá, haciendo gala de una perfecta y aristotélica justa medida. Las progresiones están dibujadas con sumo cuidado y los cambios de intensidad fluyen de una manera muy natural, haciendo que nada suene forzado o metido con calzador. En definitiva, un genial debut de una banda que promete mucho y que podría aportar algo realmente interesante al género. Esperemos que se pasen pronto por Europa para poder evaluar sus habilidades en directo.