Bon Jovi: Have a Nice Day

Nada, que no. Van pasando los años y BON JOVI se empeñan en seguir repitiendo
la misma fórmula manida y desgastada. Desde “Crush” han estado haciendo el
mismo disco y pese a que las ventas sigan siendo considerables, está claro
que los nuevos lanzamientos carecen de temas capaces de quedarse en el cerebro
de los fans por un periodo prolongado de tiempo. Probablemente, el último tema
que consiguió eso fue el hit “It’s My Life”, pero vamos, creo que ya está. “Bounce” fue
un disco que pasó bastante desapercibido y “Have a Nice Day” es una compilación
de nuevos temas que, por norma general, son muy aburridos. Entiendo que Jon
Bon Jovi ya no tiene veinticinco años para andar escribiendo sobre amores imposibles
y chicas con el pelo cardado, pero el actual estilo de la banda es repetitivo
y bastante poco atractivo. Si con “Bounce” intentaron un giro hacia un estilo
un poco más rockero, “Have a Nice Day” vuelve al sonido de “Crush”, especialmente
en temas como “Complicated” o “Bells Of Freedom”. Incluso “Crush” tenía bastante
más gancho, con canciones como “One Wild Night” o “Just Older”. Pero desde
que BON JOVI decidieron ponerse en plan “somos-tipos-maduros”, cuesta cada
vez más escucharse uno de sus discos sin saltarse ninguna canción.

Dentro de lo más aprovechable de “Have a Nice Day”, encontramos canciones
como el single homónimo (el cual parece haber sido ideado y compuesto con la
intención de que sea primer single) o remakes de viejos temas como “Last Man
Standing”. Si digo que “Last Man Standing” es lo mejor que han hecho BON JOVI
en los últimos seis años, algunos me pegaréis, pero creo firmemente que es
el mejor tema que han editado desde hace muchos muchos años. Es el único tema
que rompe la mediocridad reinante en el resto de pistas del compacto, aunque
hablar de mediocridad en el caso de BON JOVI es hablar de mediocridad hecha
con un razonable sentido del buen gusto.

Creo que no engaño a nadie si digo que, exceptuando los dos temas mencionados,
el disco carece de muchos otros alicientes. Una vez metidos de pleno en el
material de relleno, hay cosas con mejores intenciones que otras, aunque todo
se queda en un esfuerzo que no acaba de cuajar. Canciones como “Novocaine” suenan
impersonales, carentes del famoso sonido ‘Jovi’ que tantos estadios ha llenado.
Otras como “I Want To be Loved” o la balada “These Open Arms” aburren bastante.
Es especialmente notorio el cariño que Richie Sambora le ha cogido al efecto
de guitarra-voz del “Livin’ on a Prayer”, pues últimamente lo repite en todos
los discos: sucedió en “It’s My Life”, en “Everyday” y ahora en el mencionado “I
Want To be Loved”. Dejando aparte estos temas, hay alguna cosa más o menos
pasable como “Unbreakable”, donde es posible quitarse el mal sabor de boca
que deja el resto del disco.

Creo que es el momento de que Alec Jon Such vuelva a la formación, se vuelvan
a cardar el pelo y recuperen su glorioso pasado. BON JOVI se han convertido
hoy en una banda de pop-rock aceptable sin ese toque mágico que solían tener.
No niego que sigan teniendo éxito y vendiendo discos, pero creo que la formula
necesita una renovación urgente.