Dream Theater: Greatest Hit (…and 21 other Pretty Cool Songs)

Imposible. Un grandes éxitos de Dream Theater capaz de convencer a un 1% de sus fans es sencillamente imposible. Probablemente el éxito de sus últimos trabajos, el gusto y costumbre de no parar de editar cosas apetecibles para sus seguidores, el culo inquieto de sus cinco miembros o la dicográfica de turno han hecho que se decidan a editar un Greatest hits que poco entusiasmará al fan de toda la vida. Pero no podemos negarlo, es una magnífica oportunidad para introducirse en su universo particular de virtuosismo insultante; y lo que es más difícil, unido a la par con un enorme sentido de la composición y un resultado capaz de dejar patente el absoluto potencial instrumental y la sobrehumana la capacidad de firmar composiciones dignas para el recuerdo.

El fan completista verá en las versiones regrabadas de “Pull me Under”, “Another Day” y “Take the Time” algo interesante para adquirir este doble disco, pero vaya, las variaciones están, pero más orientadas a que el fan más freak (que los hay y muchos en este grupazo) encuentre las siete diferencias. Se ha intentado meter un poco de cada disco y es un resultado bastante atractivo si bien el segundo disco (The Light Side) es un refrito de sus mejores baladas, siendo todas excepcionales.

Me parece algo absurdo comentar las maravillas instrumentales y la enorme belleza y gusto por todo lo aquí vertido. Éxtasis musical por músicos de otro planeta y probablemente el mejor disco, quizá, para adentrarse en su mundo, pero repito y acentúo, nada nuevo para el fan. Personalmente aplaudo el hecho de que hayan metido la maravillosa “Peruvian Skies” del algo olvidado FALLING INTO INFINITY o la dura y excepcional “As I Am” del TRAIN OF THOUGH. Completan el primer disco una referencia a ese enorme AWAKE como es “Lie” o “Home” del imprescindible SCENES OF A MEMORY, del que dicho sea de paso, podrían haber caído unas cuantas más.

Gran presencia la del SIX DEGREES OF INNER TURBULENCE con “The Test That Stumped Them All”, “Misunderstood” o la genial a la vez que extraña “Disappear”. Personalmente me sorprende que no hayan incluido “The Glass Prision” pero vaya, volvemos a lo de siempre, cada uno metería su propio recopilatorio. Me duele también no ver las instrumentales “Erotomania” o “The Dance of Eternity” pero cuando son Dream Theater los que hacen un recopilatorio uno ya sabe que de entrada lo que va a encontrar es bueno de por si. Y lo mejor, ese tema que quizá nunca habías reparado lo suficiente en él, sólo por el hecho de estar entre estas 21 canciones, puede que le encuentres ahora ese punto que le faltaba.

Evidentemente no faltan “Pull Me Under”, “The Spirit Carries On” o “Through Her Eyes”. La almibarada “The Silent Man” ha entrado más por el hecho de recopilar baladas, pues a pesar de ser un gran tema tampoco creo que le llegue a la altura de “Caught in a Web” (mismo disco por cierto), “Hollow Years” o “Lifting Shadows off a Dream”. El hecho de que haya varios temas en song Edit (ediciones recortadas para radio) o tomas alternativas no creo que sea motivo suficiente para que todos sus fans nos vayamos a volver locos ante la inminente entrega de estos genios americanos del metal progresivo.

Hay espacio para “Never Enough”, un corte que camina por unos derroteros que les emparejan cerca de los irlandeses U2 o “Root of All Evil” que abriera OCTAVARIUM. En definitiva, una colección pensada para enganchar al que todavía no haya quedado prendado por los Theater, temas no muy extensos, bastante directos dentro lo que es su discografía. Por cierto, la idea del título es genial: ¡Un gran éxito y 21 otras canciones que no están nada mal!

Siempre es agradable escuchar un disco de los Theater y la verdad es que todos valen mucho la pena, lo que ya no es tan agradable es pagar el precio que probablemente cueste este recopilatorio para el que ya posea todas o la mayoría de sus obras.