Revolting Cocks: Got Cock

Si su anterior “Sex-O O-lympico" no era para tirar cohetes parece que las cosas han ido mejorando en el seno de este divertimento industrial-festivo de Al Jourgensen. Puede que el dar carpetazo a Ministry le haya permitido volcarse totalmente en los cachondos Revolting Cocks y hasta me atrevería a afirmar que ha bajado de revoluciones industriales para centrarse en el post punk 80.

Los sintetizadores y las melodías comparten 50% mientras que la otra mitad sui que sigue indagando en ese material más maquinal, si bien ni de lejos está cerca de esa agresividad y contundencia sónica de los últimos tres trabajos de Ministry, dicho sea de paso, obras espectaculares. Atención a “Bitch Addictive o a “Filthy Senoritas” especialmente, cortes pegadizos, con mucho gancho y calidad.

El aire 80 se mantiene en “Air Traffic Control” mientras que en “Poke-A-Hot-Ass” hay un guiño evidente a Rammstein a pesar de transitar en el medio tiempo. El single evidente es la erótica “Me So Horny”, con muchos detalles a lo White Zombie, un estribillo cantado por Isa Martínez y unos gemidos a modo de riff. Incluyen también un remix de la misma aunque menos inspirado.

“Trojan Horse” es la que abre y posiblemente la más trabajada y seria de todas. Temazo de rock oscuro de bellísimo estribillo onda de Cult y post punk 80. “Dykes” ya transita por terrenos más propios de una banda como Ministry y posee más herencia de lo que habitualmente encontramos en los Cocks. El nivel general es alto y lo bueno es que siendo metal industrial nunca cae en la reiteración. Se nota que esta orientación dark-new wave les ha salido excelente y en ella se desenvuelven de maravilla. A pesar de ello en ningún momento abandonan el buen humor ni los comunes denominadores que encontramos en todos sus discos: ritmos maquinales y efectos por doquier.

 Puede que estemos ante uno de los mejores discos de una banda que lleva apareciendo en escena desde 1985 y mutando su formación según las circunstancias. Jourgensen demuestra que es una de las mentes preclaras de la industria y que aunque sea jugando es capaz de demostrarnos su mucha valía. Muy accesibles, algo contenidos en lo maquinal y más melódicos que agresivos. Tienen mucho gancho, palabra.