Crashdiet: Generation Wild

El hecho de aparecer en el panorama musical, y convertirse automáticamente en una de las promesas más serias y con mayor progresión del panorama Hard y Glam del nuevo siglo, pudo ser algo que pesara mucho a CRASHDIET. Un puñado de singles pegadizos, actitud, imagen, y mucha calidad… que se vieron truncadas con el suicidio de Dave Leppard, con tan solo veinticinco años, y poco después de empezar a tener éxito con la banda.

El caso es que los suecos siguieron adelante dos años después de la muerte de su compañero con H. Olliver Twisted, procedente de Reckless Love, que grabaría ‘The Unattractive Revolution’… para irse un año después. Los cambios forzados nunca son bien recibidos, pero en este caso, con tan solo dos discos editados, y con el segundo obteniendo peores críticas, el panorama era del todo menos alentador. Además que las críticas del disco no fueron tan buenas, echando en cara la simpleza del grupo, y sobre todo el que casi tuviera más importancia su imagen que su música.

Pero aún con ese panorama, han vuelto; tercer disco con tercer vocalista distinto. La imagen, la actitud y su hard rock parecen seguir exactamente en el mismo disco. Pero la calidad de su primer álbum unido a la desgracia que lo acompañó, parece que siguen pesando. El tema de adelanto, ‘Generation Wild’, que también da título al álbum tiene los ingredientes necesarios para llamar la atención: melodías fáciles, estribillos pegadizos con coros ideales para el directo… pero le sigue faltando algo para llegar al nivel que tenían en el pasado. Al menos consiguen superar a su predecesor; algo es algo.

Ya con la inicial ‘Armageddon’ uno cree estar escuchando un grupo sleazy de los años 80. Ese rock inconfundible con unos estribillos para corear con los puños en alto se apodera desde el primer momento del oyente. A la larga adolece de que los diez temas se parezcan tanto y tengan todos la misma estructura, pero es parte inequívoca de su encanto. El tema que da título al disco ha sido elegido como single de adelanto de manera muy acertada; además de que el apoyo visual para este tipo de grupos es importante, el tema brilla con luz propia.

Pero no viven solo de singles. ‘Rebel’ por ejemplo es menos pegadiza, más rápida, pero sobre todo, más macarra y cercana a Skid Row. En esa onda también se encuentra ‘Down with the dust’, dejando entre ambas el clásico medio-tiempo que no falta en este tipo de discos, ‘Save Her’. No hubiera estado de más que se dejaran alguna de ellas para la parte final, donde las canciones se muestran más lineales y carentes de la chispa inicial. Aún así, ‘Beautiful pain’ consigue remontar el vuelo, después de ‘Bound to fall’, algo más floja, y con cierto aire a los Europe más antiguos. Buena nota para los suecos, que habrá que ver como se desenvuelven con su nuevo vocalista en directo. No será por actitud, no.