Tarja: From Spirits and Ghosts (Score for a Dark Christmas)

Si eres de los que odias los villancicos está claro que este no es tu disco, pero dale la oportunidad ya que Tarja intenta darle un toque diferencial, gélido y oscuro. La diva de la tierra de los mil lagos hace un poco lo que le apetece en cada entrega, y esta vez la guitarra eléctrica está proscrita. Disfruta de lo entregado y olvídate de viejas guerras y exbandas.

Navidad, oscura navidad… La diva operística Tarja Turunen que tocó el cielo con Nightwish continua su andadura en solitario haciendo un poco lo que le viene en gana a cada momento. Esta vez toca villancicos oscuros, nada nuevo si tenemos en cuenta que ya grabó un disco navideño en su Finlandia natal, sólo que esta vez lo grabó en las playas del Caribe y en pleno verano. El resultado es tan previsible como bello y hará las delicias de sus fans ya que el toque oscuro conseguido es realmente tan bello, como las fotos con las que posa con sus mil-y-un vestiditos. La baza estética es algo con lo que siempre juega Tarja, pero en lo estrictamente musical, lo que importa, consigue ampliamente su cometido.

Voces de niños, atmósferas inquietantes, orquesta grandilocuente y su eterna voz que reinventa un poco un género tan anodino y anquilosado como los villancicos. No olvidemos que son utilizados para la tortura, junto a las canciones infantiles y el death metal. El disco se abre con la belleza templada de “O Come, O Come Emmanuel”. Oscuridad en la que se filtra la voz de Tarja cual rayo de luz en un clásico bello y rotundo. “Together” es el tema de nuevo cuño y va muy en la línea de los últimos trabajos aunque encaja perfectamente en el ambiente de este proyecto navideño. “We Three Kings” es un tema muy versionado, pero Tarja sabe darle su toque personal con esos teclados y esa orquesta tan de banda sonora. La popular “Amazing Grace” ha quedado ralentizada pero es bonito oírla cantada con Tarja casi a capela. En “O Tennenbaum” hay pianos y cascabeles entre tinieblas y se anima con unas orquestaciones a lo Trans-Siberian Orchestra mientras que “Have Yourself a Merry Little Christmas” posee acentos orquestales que rompen un poco la monotonía de tema.

“God Rest Ye Merry Gentleman” se abre con voces dobladas pero vuelve a la velocidad de crucero imperante en el disco. Grandes arreglos y gélidas temperaturas, de hecho, uno puede llegar a imaginar a Tarja y la orquesta tocando sobre la nieve, algo que tiene mérito de haber conseguido. Ya que habla perfectamente castellano nos brinda un “Feliz navidad” aunque otra vez ralentizado. El tema pierde alegría pero gana en solemnidad. “What Child Is this” es perfecta para ofrecer imágenes de la vasta y salvaje tundra siberiana. La sensación de espacio abierto y naturaleza es abrumadora con los delicados juegos de teclado y campanillas. Esta vez se deja a la orquesta en primera línea. Finaliza con “We Wish You a Merry Christmas”, el tema más conocido y el más insufrible, por lo que es muy meritorio lo conseguido por Tarja. Revisitación oscura y lenta del clásico con buenos resultados, incluyendo voces de ultratumba y psicofonía que harían las delicias de Iker Jiménez. Hay incluso una base pregrabada de base consiguiendo dar más ganas de sacar una katana a media cena que de felicitar la navidad.

Si eres de los que odias los villancicos está claro que este no es tu disco, pero dale la oportunidad ya que Tarja intenta darle un toque diferencial, gélido y oscuro. La diva de la tierra de los mil lagos hace un poco lo que le apetece en cada entrega, y esta vez la guitarra eléctrica está proscrita. Disfruta de lo entregado y olvídate de viejas guerras y exbandas. Tarja se muestra tal como es, y sí, es una de las mejores voces de la escena metal, de eso no puede haber duda posible. Ideal para poner el disco en familia de banda sonora mientras debates con tu cuñado las elecciones catalanas y el cero a tres del Barça.