Hay que ver lo que se ha evolucionado en la escena metálica en los últimos tiempos. Tanto de puertas para dentro, como en sentido inverso. Y es que a día de hoy, y aunque parezca mentira, la línea entre lo que es rock y lo que es pop experimental roza casi lo imperceptible, llegando al extremo de que ambas audiencias confraternicen y surjan nuevos horizontes para un grupo de músicos que lejos de querer ser catalogados como “x” o “y” justamente persiga el reconocimiento de aquellos interesados en las canciones propiamente dichas, en el estado del arte.

Y ya no son uno, ni dos, ni tres los ejemplos. OCEANSIZE son otra de esas muestras de banda que gusta de la mezcla y de la experimentación de sonidos. Si nombres como los de MUSE o PLACEBO – en una vertiente más rock/pop- dieron el salto a la gran plataforma mediática, otras como THE MARS VOLTA o iLIKETRAINS siguen pululando en un terreno más underground; lo que no es indicador de un estado de pugna con el reconocimiento y la aclamación del público.

Pues bien, OCEANSIZE son la cara de la moneda del triunfo comedido en su lugar de procedencia – dígase Manchester y hágase extensible al conjunto del Reino Unido – que ha sabido mover bien sus piezas en la última década . Tras la creación de un sello como Superball Music la banda británica ha visto las puertas abiertas de la promoción y de los países más meridionales.

Practicando un rock sensorial, sin llegar al extremo del de las bandas de post rock metalizado como PELICAN, o al estado etéreo de EXPOSIONS IN THE SKY o GYBE!, OCEANSIZE compendia los elementos de distintos estilos musicales contemporáneos. La mezcla y la exploración instrumental tampoco llega a los niveles de potencia y contundencia de ISIS o CULT OF LUNA; pero experimentación hay…aunque no de pie a mezclar los términos de nuestra clasificación. Estamos ante una banda de pop/rock progresivo, de corte independiente, cantado y con una base guitarrera innegable.

No hacen asco estos chicos a los pasajes ambientales, con un hilo de notas de teclado que se pierde en el transcurso de las canciones; temas como “Savant” lo demuestran, trasladando al oyente hasta una dimensión delicada, donde todo parece suspenderse en la gravedad. Un estado muy “anathematico” si se me permite la expresión.

Las voces se desarrollan en consonancia con la música. El cantante Mike Vennart recuerda en ocasiones al cálido embrujo de Gavin, alias cantante de DREDG.

Para los resultadistas y escépticos hay que decir que “Frames” es un álbum realmente variado. Tras dos discos previos, entiendo que la evolución ha sido realizada en el buen camino. Podemos ver entonces, la cabida potencial en un mismo trabajo de temas como “An Old Friend of the Christies”, en un tono muy post-rock, que crea un clima mucho más pesado que el resto de canciones y que se apoya en una estructura más machacona. Y todo ello a lo largo de más de diez minutos de duración, que al final se hacen casi cortos.

Y después de la tormenta, llega la calma. Qué mejor muestra de este estado de reposo que “The Frame”, último corte de este trabajo que es como un reconfortante alivio después de los 65 minutos de música.

Buen descubrimiento que pasa a la lista de “futuribles”.

Alejandro Pérez

Grupo:Oceansize

Discográfica:Superball Music

Puntuación:8

Canciones:

  1. Commemorative____T-Shirt
  2. Unfamiliar
  3. Trail of Fire
  4. Savant
  5. Only Twin
  6. An Old Friend of the Christies
  7. Sleeping Dogs and Dead Lions
  8. The Frame

Año:2007