Impresionante, de verdad que hay que sacarse el sombrero ante este cuarteto de Kentucky. Derroche de poderío, feeling, grandes ideas y de saber tocar palos distintos y unirlos de forma orgánica, no hay nada forzado. Menuda mezcla: rock sureño, hard rock y un gran deje a lo Pearl Jam especialmente por la voz de Chris Robertson (muy a lo Eddie Vedder). Dieron bastante que hablar con su homónimo disco y de hecho su notable repercusión hizo que Roadrunner explotara el filón a base de EP’s y directos. No es de extrañar que la compañía crea que tiene entre manos a “the next big thing” pues la calidad es enorme.

Trece cortes en los que el relleno es palabra proscrita, con estribillos para el recuerdo como el de “Reverend Wrinkle” o riffs con sabor a Led Zeppelin caso de “Soulcreek”. En esta misma hay presente también grandes momentos a lo Black Crowes, con un estribillo muy poderoso y el enorme trabajo de Robinson y Chris Wells en las guitarras. Espectaculares solos repletos de feeling, detalles y muy buenas meneras.

Destacan especilamente esa semibalada orquestada, con piano y acústicas titulada “Things My Father Said”, conseguida, incluso algo lacrimógena, de esas que tocan la fibra. Cómo no el single “Blind Man” es un trallazo de riff 70ero y, si la lógica fuera algo normal en el negocio musical, les elevaría a lo más alto. Todo un himno. La producción es ideal y el equilibrio entre instrumentos y voz es de ensueño. La temática de las letras típicas historias sureñas

“The Bitter End” combina un inicio clásico a lo hard rock con un mucho de onda Pearl Jamera e incluye toda una demostración de habilidad con las baquetas de John Fred Young, sin necesidad de llegar al solo, simplemente adornando y enriqueciendo. El medio tiempo “Peace Is Free” vuelve a indagar en el sonido Seattle aunque el estribillo es 100% positivo, de esos de corear mientras la multitud menea los brazos en alto.

Hay momentos en los que no se amilanan jugando con sonidos más tradicionales del sur como en “The Key” y otros en que suenan mucho más directos y les da por dar total protagonismo a las guitarras a lo Allman Brothers (salvando las distancias, claro). “You” es su concesión a la comercialidad, baladita algo tópica pero muy bien construida. “Sunrise” es una maravilla, una delicia reaggae combinada con guitarrazos y con otra demostración tras los parches de Young.

Es imposible decir si esta banda está destinada a reinar pero argumentos no les faltan. Son sumamente atractivos y sus influencias pueden gustar a un amplio abanico de públicos. De largo uno de los discos más frescos en lo que va de año. De verdad, toda una sorpresa, y sin duda alguna: uno de los compactos del año.

Jordi Zelig Tàrrega

Grupo:Black Stone Cherry

Discográfica:Roadrunner

Puntuación:8.5

Canciones:

  1. "Blind Man"
  2. "Please Come In"
  3. "Reverend Wrinkle"
  4. "Soul Creek"
  5. "Things My Father Said"
  6. "The Bitter End"
  7. "Long Sleeves"
  8. "Peace Is Free"
  9. "Devil's Queen"
  10. "The Key"
  11. "You"
  12. "Sunrise"
  13. "Ghost of Floyd Collins"

Año:2008