Hoobastank: Every Man for Himself

Nuevo disco, el primero en tres años de HOOBASTANK. Algun heavy ultra-ortodoxo
saldrá ahora de la cueva para gritar “y podrían haber estado 30 años más sin
editar ningún disco” pero señores, el nuevo disco de HOOBASTANK me parece francamente
bueno.

Sin dejar de ser radiofónico, tanto como “The Reason” – por hacer una comparación
facilita-,  “Every Man for Himself” sirve para que HOOBASTANK terminen de ganarse
la credibilidad por parte de aquellos que vislumbraban en ellos un fenómeno
efímero y motivado por una promoción considerable por parte de su compañía,
Island.

Comprendo que HOOBASTANK no son la banda más underground del mundo, ni la
más maquetera y que el éxito les ha llegado con una rapidez considerable, pero
creo que se lo han ganado. Han sabido componer buenas canciones, con gancho,
pies y cabeza. Han sabido llevar una trayectoria coherente y me temo que se
merecen más respeto que otras formaciones rockeras más establecidas. Al menos, éstos
americanos pueden alardear de haber editado un buen disco con más de dos canciones
aprovechables. Ya es más de lo que muchos pueden decir.

¿Y que entiende un servidor por estilo más definido y creíble? Por poner un
ejemplo de lo más tonto, procedamos a escuchar “Get Inside”. Machacante, pero
melódica. Firme, pero flexible. Bailable, incluso. Y como colofón, un trabajo
de guitarras por parte de Dan Estrin que es sencillamente mareante, sin caer
en la auto-complacencia tan típica de los guitarristas. No hay espacio para
solos virtuosos, sino acordes destinados a mover cabezas y pegar saltos.

No obstante, el disco está producido por un maestro del arte de mover cabezas.
Howard Benson ha trabajado con bandas clásicas de la talla de SEPULTURA o MOTORHEAD,
así como con formaciones más actuales al estilo de P.O.D, PAPA ROACH y CRAZY
TOWN. Y aunque HOOBASTANK y MOTORHEAD tienen más bien poco en común, la labor
de Howard es igual de convincente en los trabajos de ambas bandas. Y para colmo,
el tipo también produjo “The Reason”. Imagino que debe tener ya alguna noción
sobre cómo deben sonar los chicos de HOOBASTANK!

Entre las canciones más destacables de “Every man For Himself”, encontramos “Moving
Froward”, uno de esos temas que van creciendo a medida que los escuchas una
y otra vez. También hay que darle una oportunidad a “Born To Lead”, belico
y marcial, pero hímnico a la par que consistente y rockero.

El verdadero tema estrella del disco es, sin duda, el ya mencionado “Get Inside”.
Un hit-single en potencia que, aun no entiendo cómo, aún no se ha convertido
en un éxito aplastante. Me temo que la gente sigue ocupada cantando “If I Were
You”, el otro tema estrella del disco y uno de los singles del mismo. Es una
buena continuación del hit “The Reason” (si, ese que ha utilizado cierta marca
y en la que el bueno de Eduardo Noriega enseña el trasero antes de tirarse
al agua en vaya usted a saber donde) y tras leer una entrevista con el vocalista
Doug Robb, entiendo bastante mejor el significado. “If I Were You” está dedicado,
en parte, a Scott Weiland de VELVET REVOLVER, con quienes HOOBASTANK giraron
hace unos años. Según Robb el tema habla de esos tipos que lo tienen todo y
no lo valoran. Bonita indirecta hacia Weiland. Haciendo amigos, imagino.

Para finalizar el analisis del disco es de recibo comentar que la letra de “Don’t
Tell Me” es probablemente una de las mejores que ha hecho la banda. Descubridla
vosotros mismos…

Buena continuación de su carrera. Esperemos que no desaparezcan en un par
de años. Creo que es una de las pocas bandas salidas de la hornada numetalera
de principios de milenio que realmente tienen algo que decir y sería una pena
que pasaran a mejor vida.