The Black Dahlia Murder: Everblack

Sexto disco en una década. A gran ritmo va la Carrera de THE BLACK DAHLIA MURDER, y parece lejano aquel maravilloso ‘Miasma’… cuando sólo tiene ocho años. Ese ritmo vertiginoso seguramente sea una de las causas de los constantes cambios de formación que han tenido, quedando Trevor Strnad y Brian Eschbach como únicos miembros fundadores. Con el lanzamiento de ‘Everblack’ no ha habido excepción, y el puesto de bajo y batería presenta nuevos músicos.

Por lo demás, está claro quién sigue llevando el peso (lógico) en el grupo, y han hecho un álbum en plan apisonadora, directo al grano. Por eso se han ganado la fama de ser una banda que rara vez falla, aunque sepamos lo que nos vayan a traer. Pero mientras siga siendo material bueno, ¿qué importa que siga siendo prácticamente lo mismo de siempre? ‘Into the Everblack’, el primer adelanto, además de con su consecuente título, nos adentraba en la onda en la que nos íbamos a encontrar en todo el disco. Alan Cassidy mantiene el tipo como nuevo baterista, con blasbeats, doble bombo y rapidez por todas partes. Los cambios de ritmo estaban a la orden del día, aunque no era el mejor corte de los que nos podían haber presentado.

Personalmente, y a pesar de su duración, hubiera preferido algo como ‘In Hell Is Where She Waits for Me’, primer tema y que muestra más de lo que es capaz la banda, con cambios más bruscos y un solo de quitar el hipo. O en un estilo más directo y corto, una agresiva ‘Blood Mine’ o ‘Control’, con otro solo de guitarra espídico. Será por temas buenos que han incluido… También es destacable ‘Raped in Hatred by Vines of Thorn’, deudora de los primeros tiempos del sonido Goteborg, y donde siguen demostrando que su música transmite en casi todo momento una sensación de amenaza. ‘Goat of Departure’ es como un cuchillo afilado, chocante, con un punto black, pero encuentra su momento de calma para colar el solo de turno. Y es que el trabajo de guitarras, tanto solistas como rítmicas, es de sobresaliente. Y a pesar de lo que parezca, es un acierto colar dos de las composiciones más largas al final, ya que tanto ‘Their Beloved Absentee’ como ‘Map of Scars’ terminan siendo de las mejores canciones, llenas de contrastes (y más cambios de ritmo). Salvajes.

Quizá pequen algo de la duración global para el estilo que hacen, pero eso no es obstáculo para sus seguidores. Lo que está claro es que ‘Everblack’ es una piedra más en una carrera sólida que les ha llevado a convertirse en una de las formaciones más asentadas y destacadas de la escena deathcore, death melódico, o la etiqueta donde quiera encuadrarles cada uno. El tornado/tormenta de su portada no podría ser más acorde al contenido del álbum.