Dregen: Dregen

Sin rodeos, lo que encontramos en ‘Dregen’ es, ni más ni menos, que un disco de puro rock n’roll, con sus distintos momentos y ramalazos, con un aire retro en la producción que nos hace echar la vista atrás diez o quince años, y en el que el guitarrista nos muestra que todavía tiene mucho que decir con sus composiciones.

Ya son unos cuantos años en los que, para nuestra desgracia, BACKYARD BABIES están parados, o al menos, en silencio. Hace más de cinco que editaron un correcto álbum homónimo, y acostumbrados a tenerlos año tras año por nuestras tierras, en breve hará cuatro que no los tenemos de visita. Por eso Dregen buscó en qué ocupar su tiempo, primero tocando la guitarra y haciendo coros en el debut de IMPERIAL STATE ELECTRIC, el nuevo proyecto del ex-líder de THE HELLACOPTERS, Nicke Andersson, y ahora ha sacado, por fin, su debut en solitario.

Sin rodeos, lo que encontramos en ‘Dregen’ es, ni más ni menos, que un disco de puro rock n’roll, con sus distintos momentos y ramalazos, con un aire retro en la producción que nos hace echar la vista atrás diez o quince años, y en el que el guitarrista nos muestra que todavía tiene mucho que decir con sus composiciones. El álbum es corto, sin alardes de ningún tipo, directo al grano desde ‘Divisions Of Me’, buscando melodías facilonas (con coro femenino) en ‘Just Like That’, que no extraña que haya sido el single elegido para dar a conocer esta nueva aventura. Una fórmula parecida usa más adelante en ‘One Man Army, pero antes de llegar a ella nos encontramos algunas sorpresas como ‘Flat Tyre on a Muddy Road’, donde se desmarca en un corte blues que marca el toque de distinción del álbum, o la densa ‘Gig Pig’, que no tiene el aire fiestero y sí una atmósfera más oscura de lo que nos tiene acostumbrados. Ésta se la deja a ‘Pink Hearse’ o a ‘Bad Situation’, cuyo riff inicial recuerda muchísimo a JANE’S ADDICTION. Para la parte final, una prescindible ‘6 till 10’, y las enérgicas ‘Refuse’ y ‘Mojo’s Gone’, donde por fin muestra algo de garra. El caso es que no sé bien si será por la producción o por el tipo de composiciones, siempre estás esperando a que haya un punto de inflexión, un momento en el que el disco rompa y despegue, y nunca llega. Dejando lo buenas o no que sean las canciones más reciente que ha hecho, lo que está claro es que en actitud pocos pueden competir con él.

Esperemos que sea un puente para la vuelta de BACKYARD BABIES, que realmente es lo que quiere todo el mundo. De momento, calmaremos nuestra sed con las tres fechas que anunció para mediados del mes de diciembre. ¿Qué mejor manera de despedir el 2013 que con una buena dosis de rock? Además, son las que cierran su tour, y seguro que nos deparará algo especial. Lo malo es que precisamente en ellas no estará acompañado de IMPERIAL STATE ELECTRIC. Otra vez será.