Devils Train: Devils Trains

Todos aquellos que echen de menos a Kari Kainulainen y a Jörg Michael de Stratovarius, pueden olvidarse de su vuelta al seno del grupo. Para qué volver a un grupo con la fórmula extinta y sin Timo Tolkki cuando son capaces de parir una obra tan redonda como este “Devils Train”. No van solos. Les acompañan en esta aventura Roberto Liapakis de Mystic Prophecy y el gran Laki Ragazas a las guitarras para firmar un discazo de hard rock influenciado mucho por esa oscuridad de Masterplan. Olvidaros del power metal al que podemos relacionar a esta gente y disfrutad de esta colección de trallazos melódicos y adictivos. Es lo mejor que ha hecho alguien de la familia Stratovarius desde la primera parte de los “Elements”.

Van directos a la yugular. Carnaza potente y temas que caminan a base del trabajo excelente de la base rítmica de los Strato. Todos los cortes merecen elogios, pero sobretodo ”Roll the Dice” y la inicial “Fire and Water”. Hay mucha velocidad y actitud, con un deje a los Damn Yankees y un buen meneo a la coctelera de influencias. Los temas son sumamente directos y apenas sobrepasan los tres minutos. Eso le da frescura al producto y demuestra que se pueden lucir todos los instrumentistas sin necesidad de tirar de minutos. La contundencia y la bella cadencia de “To the Ground” es rasposa y fuerte. Grandísimo trabajo en guitarra y voz. Sorprende que hayan optado por una versión como single, caso de “American Woman” de The Guess Who. No es lo más representativo, pero si una grandísima versión que encaja de maravilla en su estilo.

“Forever” es un título que nos recordará a la ex banda de Michael y Kainulainen. Curiosamente es también una semi balada que se acelera y que posee uno de los mejores solos del disco. Combinación de sutileza y decibelios en el riff marcado y presente de “Coming Home”. Si hay algún pero que achacarle al disco es que los temas y la producción hacen que todo suene tan compacto y personal como repetitivo. Eso no le resta enteros al disco, pero si que hay una evidente linealidad. Gran estribillo el de “Yellow Blaze” consiguiendo uno de los mejores temas del disco gracias a esos coros tan duros. Definitivamente bajo y batería llevan la voz cantante… Para dejar descansar a la locomotora desbocada nos encontramos con la inicialmente pausada “The Answers” que empieza con acústicas para conseguir un crescendo y desembocar en un medio tiempo precioso. También rompiendo esquemas está el inicio bluesy de Devils Train. Posiblemente el himno definitivo de este grupo.

Gran disco. Confieso que me he enganchado y maldigo haberlo dejado en una de las pilas de promos durante tanto tiempo. Esperaba que los últimos trabajos de Stratovarius eclipsasen todos los discos de sus excomponentes, pero con Devils Train esto no va a pasar. Son una locomotora sin frenos. Saben a lo que juegan y apuestan fuerte. Hay mucha contundencia y una gran combinación de hard con unos riffs muy duros para el estilo. Veremos dónde les lleva este disco, pero está claro que no les va a ser fácil subir los peldaños hasta el éxito. Veremos si la escena se da cuenta de que esta gente existe…