Lacuna Coil: Dark Adrenaline

Gratísima sorpresa por parte de los milaneses Lacuna Coil. Soy de los que defiende encarecidamente que el cénit de la banda está en sus tres primeros discos y sus primeros EPs. Su posterior acercamiento a los sonidos más comerciales y “americanos” los vi como algo respetable pero forzado, perdiendo el combo parte de su magia primigenia y original. A pesar de que han demostrado siempre un gran gusto compositivo sus últimas obras no terminaban de engancharme ni convencerme, aunque está claro que los objetivos que tenían marcados como grupo se han cumplido. Ozzfests, giras por Estados Unidos, un disco de platino… Así que esperaba más bien poco de su adrenalina oscura.

Podríamos estar hablando del mejor disco de Lacuna Coil desde “Comalies” y casi seguro que el mejor de los últimos tres. El compacto atrapa desde los primeros compases. La fórmula sigue siendo la misma de siempre, solos puntuales, riffs vigorosos, afinaciones graves, un gran protagonismo de la base rítmica y los duetos vocales de Andrea y Cristina. Los singles potenciales son casi todos, y eso es algo muy meritorio. La oscuridad a la que se refiere el título está presente en todos los cortes, así como un endurecimiento notorio respecto a sus anteriores obras. Aquí todo funciona, especialmente en la primera: “Trip the Darkness”. Un single ideal para abrir el disco con entrada grandilocuente y poderosas guitarras.

Las melodías mandan en unos cortes que se mueven en los tres minutos. Incluso en “Against You” hay guitarras solistas. Destaca especialmente “Kill the Light” por el pegadizo estribillo. Siguen los estribillos inspirados en “Give Something More”, un tema que va a estar seguro en todos sus próximos conciertos. Genial la combinación de voces con la entrada de Scabbia en los estribillos. Los protagonismos se turnan y es todo un acierto darle más peso a Andrea. Cuando ambas voces se combinan es cuando el grupo alcanza los mejores resultados. Más comercial es “End of Time”, un bonito medio tiempo, pero la verdad es que en este trabajo dominan los cortes agresivos, y son los que salen mejor parados.

El medio tiempo “I Dont Believe in Tomorrow” es otra buena demostración del gran momento compositivo de los itálicos. Atención a la dureza de los riffs y al sonido conseguido pues por momentos no parece, en absoluto, Lacuna Coil. Otro de los grandes logros del disco es que los temas apenas se parecen entre ellos, cosa que sí ha pasado alguna vez lastrando mucho la nota final. “Intoxicated” es un single clarísimo. Un estribillo impecable, una bonita línea vocal, protagonismo de la Scabbia y muy accesible para todos los públicos. Subrayo otra vez, ¡temazo!. La sorpresa mayúscula es la versión, esta vez de REM y su colosal “Losing My Religion”. Al principio suena muy rara pero poco a poco vas entrando y ves que es un ejemplo perfecto de lo que tiene que ser una versión. Adaptada a los terrenos Coil con maestría. Mucho mejor que la de Depeche Mode.

Y el final del disco es genial con dos cortes excelentes. Por un lado la pegadiza “Fire”, otro single perfecto y otro tema que estará sí o sí en sus próximos conciertos. Y cierran con la oscura “My Spirit” que incluye un fragmento narrado en italiano por parte de Andrea Ferro. Es un medio tiempo muy inspirado y oscuro.

Gran disco y demostración de poder por parte de unos Lacuna Coil que, a pesar de que van ganando adeptos y creciendo, habían perdido gran parte de su público primerizo y caían en brazos de los gustos ingleses y norteamericanos. Me atrevo a decir que con esta obra van a aglutinar y convencer a todo su público potencial. Hay singles potenciales por doquier y una sensación de que uno recupera definitivamente a una banda en la que, en su día, tuvo grandes sensaciones y apuntó realmente alto.