Mirror To The Sky

La legendaria banda de rock sinfónico Yes vuelve a la carga con este, su vigesimotercer álbum de estudio, con un aire fresco y rejuvenecedor en lo que probablemente sea su mejor álbum en mucho tiempo.

Un trabajo que combina la visión rockera más clásica de la banda con unos aires psicodélicos algo más modernos y una producción impecable, resultando en una escucha de lo más interesante , tanto para los incondicionales como para los oídos que se acerquen por primera vez. Una apuesta que en 2023 sigue siendo exitosa y apunta directa al firmamento para llevar de paseo al oyente entre las estrellas y las nebulosas. Déjese llevar, el viaje promete.

Eyección

“Houston, despegamos”. O algo así parece que quieren hacernos decir en nuestras cabezas con “Cut From The Stars” una primera pista con tonos psicodélicos, una constante durante todo el álbum pero que de esta manera, con esas líneas de bajo, son palabras que casi se pueden saborear en los labios. A continuación, con “All Conected” el bajo cede su protagonismo a unos solos de guitarra que nos elevan y nos acompañan en esta primera parte del viaje. 9 minutos de poema cordófono que no tienen desperdicio. “Houston, estamos en órbita”.

Seguimos con “Luminosity” una sinfonía de otros 9 minutos, donde la producción sigue siendo brillante, la mezcla de elementos es impecable aunque quizá el resultado quede un poco “Villanciquil”. El titulo avisa, aunque se pasa de frenada. Un riesgo aceptable para este viaje interestelar.

Y así “Living Out Their Dream” nos devuelve a la trayectoria esperada. Unos aires realmente ochenteros, líneas de bajo estelares y todo perfectamente integrado, nos traen reminiscencias de Blue Öyster Cult y demás grandes referentes del estilo. Una sinfonía apetitosa de casi cinco minutos. Pónganse cómodos, el viaje continúa.

De manera plácida y satisfactoria queda atrás “Living Out Their Dream” y nos encontramos inmersos en el tema que da nombre al disco “Mirror To The Sky”, una sinfonía colorista y un himno a lo orquestal con sus más de trece minutos. Una intro de patrones sobrios, deja paso a una sección de rock colorido y a continuación, presentación de cuerdas y coros en lo que, una vez presentados todos los elementos es un suave surcar estos cielos cargados de psicodelia a donde nos transporta la propuesta de Yes. Una oda al juego y el trenzamiento de elementos musicales, repleta de detalles como si de un caleidoscopio se tratara. Su propia analogía del viaje; con introducción, nudo y desenlace. De nuevo la producción es impecable. Y Houston, la misión está siendo un éxito.

En “Circles Of time” regresamos a ese estado angelical por el que ya transitamos anteriormente aunque , quizá en esta ocasión, el resultado es mejor. Consiguiendo crear una experiencia íntima que reconforta, que invita a la meditación, a parar, después de la odisea que la precede. No será el punto fuerte del disco para nadie, pero puede ser un tema intimista bastante rescatable.

Llamando a La Tierra

Para enfilar la recta final, “Unknown Place” comienza rompiendo con todo el intimísimo posterior devolviéndonos a los sonidos más rockeros desde la misma introducción, con aires de Cowboy Espacial. Algo más de ocho minutos muy disfrutables donde se combinan el virtuosismo de las guitarras y los bajos con la integración de elementos más psicodélicos. Una jam espacial para menear el cuello como si nos encontrásemos en la cantina de Star Wars y la aventura no acabase bien, a juzgar por esos aires de réquiem en el desenlace. De nuevo y como en todo el álbum, el nivel de producción y narrativa musical es altísimo.

Para clausurar “One Second Is Enough” uno de los temas más cortos del álbum con sus cuatro minutos escasos pero lleno de capas y ritmos da paso a “Magic Potion” una poción llena de riffs de guitarra y bajo, aires ochenteros que en ocasiones, juegan con lo Disco y que crean un colofón ideal para este viaje que, sin saber muy bien cómo, ha llegado a su fin, de la manera en la que uno sueña y de repente se despierta en su habitación.

Obviamente el tiempo ha pasado y la formación ha cambiado pero el nivel de producción, de virtuosismo y narrativa musical es muy de agradecer en unos tiempos donde triunfa lo simple. Desde luego merece y mucho, la pena la escucha. ¿Perdurará en el tiempo? Bueno, un loco dijo una vez que eso del tiempo, es algo relativo.