Wolfheart: Skull Soldiers

Era abril del año 2020, en plena confusión por el auge de la pandemia que todavía hoy se niega a retirarse, cuando los finlandeses Wolfheart presentaron su quinto álbum de estudio. ‘Wolves Of Karelia’ es de lejos el disco más aclamado por el público y por la crítica. Si es que quedaba algún rincón de este mundo totalmente ajeno al surgimiento de esta potente banda, eso se acabó con la llegada de dicho trabajo. Sintiéndose imparables, parece que la formación, por el momento consolidada gracias a la incorporación de Vangelis Karzis a la guitarra, se atreven a ir un paso más allá y entregar ‘Skull Soldiers’. Este representa el primer E.P. de su todavía no muy larga carrera musical, y consta de un total de cuatro canciones.

En constante evolución

“Skull Soldiers” arranca con un inicio casi tribal, formado por sonidos muy primitivos, para luego perderse entre los ritmos potentes y pesados que a estas alturas ya esperamos de la prometedora banda. Seguidamente se encuentra “Hereditary”, más acelerada y adornada con pequeños detalles. Hablamos de los malabares que hacen Tuomas Saukkonen y sus chicos con distintos tonos y sonidos. Así es como se aprecian melodías de fondo notablemente agudas entre los riffs, muy pegadizos, y el trabajo de Joonas Kauppinen a la batería, que aporrea la caja sin piedad alguna.

Llegado este momento está claro que un E.P. no parece suficiente, pues estaría bien poder escuchar más material como este. Realmente se nota el esfuerzo invertido, tanto en el disco anterior como en este E.P., por hacer de sus composiciones algo más que temas predecibles de death metal melódico.

Por desgracia Wolfheart tenía otros planes: en el tercer puesto se sitúa una versión en acústico de “Aeon Of Cold”. Quizás hubiera sido de agradecer, como se ha dicho, más contenido todavía inédito, pero una versión presentada de un modo tan destino a su versión original tiene el factor sorpresa que cualquier fan ama de igual manera. Esta canción forma parte de ‘Shadow World’, disco presentado en el año 2015 y acogido con curiosidad por sus fans. A diferencia del tema original, que de delicado solo tiene pequeños fragmentos a piano, la presentación que encontramos ahora es totalmente diferente. Cantada por Lauri Silvonen, el bajista, y acompañada tan solo de los acordes de una dulce guitarra acústica, le da una textura diferente al disco, aunque tan solo sea por unos minutos.

Finalmente, y para despedir ‘Skull Soldiers’, hay una versión en directo de “Reaper”, perteneciente al ya mencionado ‘Wolves Of Karelia’. La peculiaridad de esta interpretación es que estamos acostumbrados a que en las versiones en directo se oiga también al público, estallando de júbilo al escuchar las primeras notas de cada tema, a los aplausos, a los gritos y a los mismos músicos animado con palabras y más gritos a la multitud, o dejando que sean los demás quienes entonen estrofas míticas de sus canciones.

Pues bien, como este disco fue lanzado en tan difíciles circunstancias, la banda no tuvo más remedio que conformarse con un streaming. La cuestión es que las dos versiones, la original grabada en un estudio y la del directo, no difieren mucho la una de la otra.

¡Queremos más!

Poca cosa se puede decir más allá de lo comentado hasta el momento. Ya sea la llegada del ‘Skull Soldiers’ una maniobra de la banda para seguir creciendo al ritmo que lo han hecho hasta ahora, o bien un experimento por pura diversión enmarcado en la situación de hastío general provocada por la ausencia de buenas noticias para el mundo del espectáculo, está claro que es un trabajo esperado y, hasta el momento, bien recibido.