Con el nuevo álbum de Virgin Steele, 'The Passion Of Dionysus', David DeFeis vuelve a exhibir su inagotable talento para crear obras complejas alejadas de la comercialidad.

Virgin Steele, o lo que es lo mismo, su alma máter David DeFeis, no entregaba nuevas composiciones a sus seguidores desde que en 2015 publicase ‘Nocturnes Of Hellfire & Damnation”. De modo que, tras una larga espera de ocho años, ‘The Passion Of Dionysus’ llega como agua de mayo (aunque en este caso mejor sería decir “vino” en lugar de agua teniendo en cuenta el título del álbum).

A Virgin Steele, se le puede vincular con muchos géneros, hard rock, heavy metal, power metal, etc. Pero ninguno encajará del todo en su propuesta porque Virgin Steele es un estilo en sí mismo. Igual que a Jethro Tull se le identifica por la flauta y la particular voz de Ian Anderson, con Virgin Steele se puede hacer un paralelismo. Tenemos a un grupo con sus propias particularidades, entre ellas, la presencia del piano y las características vocales de DeFeis, que, además, es el compositor de toda la música y letra, al igual que Anderson.

Junto a DeFeis, se mantiene inamovible el guitarrista Edward Pursino desde que en 1985 sustituyese a Jack Starr, presente solo en los dos primeros álbumes de Virgin Steele. El bajista y guitarrista Joshua Block y el batería Malt McKasty se unieron en 2000 y 2016, respectivamente.

Un estilo complejo y peculiar 

Como no podía ser de otra manera, el álbum, centrado en el concepto de la dualidad humana narrado en plan épico, traspasa la hora de duración. Una vez más, en su compleja arquitectura sonora encontramos todas las peculiaridades que han hecho a Virgin Steele una banda especial. Aquí no vamos a encontrar riffs interminables ni ritmos persistentes, mucho menos una voz corriente.

La riqueza de matices con las que se identifica al grupo originario de Long Island queda expuesta de inmediato con “The Gethsemane Effect”, con una introducción de ráfagas de guitarra que se clavan de inmediato en el cerebro. A partir de ahí, múltiples matices y giros estructurales se suceden continuamente mientras DeFeis va soltando sus frases cambiando de registro según se desarrolla el tema, sin olvidarse de su clásicos alaridos “marca de fábrica”.

Un inicio brillante al que le sigue la más pausada y melódica “You’ll Never See The Sun Again”, con unas exquisitas partes de piano también con el sello compositor de Defeis, que aquí ofrece partes vocales cargadas de dramatismo y envidiable versatilidad mientras las guitarras van añadiendo toques de distinción y la batería se multiplica para cubrir espacios y marcar los tiempos. “A Song Of Possession”, con un insistente  ritmo de batería, guitarras aguerridas y una nueva demostración de mutación vocal a cargo de DeFeis, mantiene el nivel en lo más alto.

Creatividad frente a lentitud y protagonismo vocal

A continuación, el dinamismo en el que se desenvolvía el álbum queda mermado con “The Ritual Of Descent” y “Spiritual Warfare”, composiciones con momentos vibrantes donde permanece intacta la creatividad de DeFeis pero a las que no les favorece el excesivo protagonismo vocal ni determinados pasajes lentos.

En mitad de la abigarrada atmósfera imperante, “Black Earth & Blood” con sus tres minutos de duración, su frescura y su simplicidad, resulta toda una agradable rareza. Quizá, el momento menos interesante del álbum lo protagonice, precisamente, el tema que le da título, donde encontramos en la voz el principal elemento conductor, respaldada por partes instrumentales menos imaginativas que en anteriores canciones.

El resto de las piezas conservan las mismas premisas, con partes más logradas que otras, pero siempre con sus giros inesperados. En “To Bind & Kill A God”, asoma la vertiente más dinámica y menos compleja, mientras que en “Unio Mystica (The Girl With The Grave Deep Eyes)” reaparecen los extensos textos y la diversidad de pasajes con inclinación hacia las atmósferas oscuras, mientras que “I Will Fear No Man For I Am A God” cuenta con un efectivo equilibrio entre los tramos calmados y los más intensos.

El barroco “multiverso sonoro” donde se desarrollan las imaginativas composiciones de DeFeis, es como cualquier obra de arte, si no se sabe apreciar, es imposible que llegue a entenderse. Así es Virgin “DeFeis” Steele, excesivo, trágico, fastuoso, minimalista, enérgico, vibrante, sosegado… Lo tomas o lo dejas.

Locky Pérez

Grupo:Virgin Steele

Discográfica:Steamhammer/SPV

Puntuación:7

Canciones:

  1. The Gethsemane Effect
  2. You'll Never See The Sun Again
  3. A Song Of Possession
  4. The Ritual Of Descent
  5. Spiritual Warfare
  6. Black Earth & Blood
  7. The Passion Of Dionysus
  8. To Bind & Kill A God
  9. Unio Mystica (The Girl With The Grave Deep Eyes)
  10. I Will Fear No Man For I Am A God

Año:2023-06-30