Mr. Bungle: The Raging Wrath Of The Easter Bunny Demo

Mr. Bungle regresó en 2020 con 'The Raging Wrath Of The Easter Bunny Demo', el álbum más pesado de su carrera y una increíble oda al thrash metal y crossover.

Se puede decir que para Mike Patton 2020 no fue un año perdido, aunque su gira con Faith No More programada para no se produjo por la covid-19, el hombre de las mil voces no se quedó quieto y aprovechó para reunirse con Trevor Dunn y Trey Spruance, sus compañeros de Mr. Bungle, para reactivar la banda después de más de veinte años y sacar el disco más pesado de su carrera.

Conociendo la ira

Con refuerzos legendarios como Dave Lombardo y Scott Ian, a Mr. Bungle se le ocurrió hacer un disco de metal como en los ochenta, sin muchos adornos, directo, divertido y pesado. El álbum comienza con “Grizzly Adams”, una introducción con púas de guitarra lentas que mantiene una atmósfera oscura y lúgubre, muy al estilo Black Sabbath, y que es un preludio perfecto a todo el peso que está por venir en “Anarchy Up Your Anus ”, que de hecho arranca el disco con un thrash metal vigoroso e imparable en el que resaltan los gritos agonizantes de Patton y el estribillo cantado en coro por todos los integrantes, como exigen los clásicos del estilo.

Siguen con temas muy directos y agresivos como «Rapping Your Mind» con un thrash metal rápido y con solos de guitarra demenciales intercalados con largos tramos instrumentales. Es cierto que si se lanzara en el ’86 probablemente sería considerado un clásico de la época. En “Hypocrites / Habla Español O Muere”, Mike Patton proclama “Speak Spanish Or Die” en medio de una divertida versión de “La Cucaracha” ¿un mensaje a Donald Trump? Probablemente… ¿Un tributo al clásico de S.O.D, «Speak English Or Die»?

«Bungles Grind» también se hizo para lod mosh pitd con su violento y sorprendente ritmo, y más adelante avanza con furia hasta “Methematics”, el tema más largo del álbum, en el que la banda revive uno de sus riffs más clásicos “Love Is A Fist” mientras Patton denuncia a todos en su micrófono. Después llega una de las pistas más «pegajosas» del disco, con coros y letras simples, pero absolutamente divertida; «Eracist» se refiere al sonido único de Suicidal Tendencies de una manera sencilla y mantiene el nivel más alto del álbum.

Los golpes siguen comiendo sueltos y «Spreading The Thighs Of Death» es otra de esas pistas para aumentar la circunferencia y la violencia del mosh pit, un hardcore frenético que destaca la agilidad clásica de Dave Lombardo en la batería y riffs intercalados e imparables que salen de las guitarras de Trey Spruance y Scott Ian para luego frenar un poco -pero sin perder el peso- con “Loss For Words”, una gran versión de Corrosion Of Conformity.

“Glutton For Punishment” dirige al oyente al tramo final del álbum, la canción más rápida, directa y pesada donde destaca el bajo de Trevor Dunn ,que dicta el ritmo de esa pista, y la voz loca de Mike Patton, que entremezcla susurros con gritos estridentes, así como los tambores furiosos de Dave Lombardo para mostrar que todos los miembros están en un nivel muy alto. Para terminar la obra, «Sudden Death» es el golpe final de ‘The Raging Wrath Of The Easter Bunny Demo’, un tema que mezcla los estilos presentes en el álbum y toma un camino casi a un grindcore, extremadamente pesado, para cerrar este gran disco a lo grande.

El moshpit en la guarida de Mr. Bungle

En ‘The Raging Wrath Of The Easter Bunny Demo’, Mike Patton, Trey Spruance y Trevor Dunn dejan de lado el experimentalismo clásico del sonido de la banda y se centran en rendir homenaje a estilos que son parte de su influencia como el thrash. metal, crossover, punk y hardcore de los ochenta y bandas como Slayer, Exodus, Anthrax, Testament, Suicidal Tendencies y muchas otras.

En resumen, el trabajo es absolutamente pesado, agresivo, divertido, quizás porque es casi un proyecto nuevo, sin tanta presión y obligaciones que tendría una banda común a la hora de lanzar un nuevo disco. Han alcanzado la perfección en su propuesta, y la presencia de Scott Ian a la guitarra y Dave Lombardo (que ya había tocado con Mike Patton en el excelente Dead Cross) a la batería para cerrar la formación de la banda son un regalo delicioso para ofrecer el sonido ideal con dos verdaderas leyendas de la época. Es una escucha obligatoria para todo aquel que sea un fanático del metal en los ochenta y noventa.