Unwavering Voices

‘Unwavering Voices', nuevo trabajo de estudio de la formación nacional de metal Sounds Of Broken Souls, llegó al alcance del público el pasado 29 de noviembre acompañado de ‘Encrypted Words', un documental en formato recopilatorio que desdobla el horizonte para mostrar el origen, epicentro y lugar de gestación del movimiento a esclarecer.

Efectivamente, elegimos el lado equivocado. Solo existe un camino. El archivo en cuestión esboza las briznas primerizas de aquello acontecido, estableciendo un corpus de conceptos sin precedentes que versan acerca de la catalogación de la sociedad en vistas de poder, hecho que revela el germen principal de la formación. Más concretamente, los autodenominados Miembros de la Confección: Sarga, voz y frontman, Urdimbre, guitarra y Trama, batería, postulan como defensores del Arte en tanto que espora de revolución, de cambio profundo y penetrante.

En efecto, el arte penetra tanto en el marco psíquico como emocional, sirviendo de ropaje de Midas al área expansiva del mensaje, la cual adopta proporciones nucleares para romper con las normas establecidas en un mundo impecable construido a base de marfil.

Voces lejanas

El pistón sonoro, materializado en base a doce pistas en este ‘Unwavering Voices’, fue confeccionado en el recóndito estudio A Hole in This Shit, de carácter nómada e itinerante, capitaneado por su creador Mikel Barodjia, quien se enmarca en el ámbito subversivo antiguerra con el objeto de movilizar información.

Tal declaración musical radica de los informes descalificados de un mundo “destrozado por la irracionalidad de intereses abruptos y cargados de corrosión e irresponsabilidad”. En efecto, el dolor es susceptible de ser traducido, siendo el mejor medio a través de la música, material conductor de la locura hacia nuestra propia redención. En palabras del propio Sarga, “los sentimientos en períodos de desgaste emocional son el deseo de la expresión en su totalidad”.

El archivo sonoro adoptó la voz característica de Sounds Of Broken Souls gracias a la mezcla y masterización de José Fernando Tercero, miembro de JFT Producciones, quien desapareció en circunstancias suntuosas y cuyo paradero es actualmente inexacto y desconocido.

En adición, la vorágine sonora fue complementada gracias a la participación explicita de músicos callejeros, entre los que se cita a John Down de Camden o Isolda Weber de Alemania, entre otros, así como las personalidades cuya preferencia era permanecer en el anonimato para dar pie al engranaje de documentación parcialmente expuesta en el documental multimedia.

El larga duración, de corte alternativo pero hungido en metal y en un grunge de caja de cartón, distorsiona la razón de forma contundente con choques bruscos y aplastantes. Una corrosión sonora que palpita con vida propia para regar los oídos de la desida de forma inexorable.

Con “Bowels», las cicatrices sonoras del LP desgarran las entrañas de la sociedad para configurar un agujero (“Hole») que regurgita las carencias del mundo material a diferentes niveles. “Restore» y “Crosses», propuestas de alto calibre, dan paso “Constance» y “Gears», de afilados dientes y baterías desafiantes. Un canto de liberación al encierro premeditado viene de la mano de “Lockdown», con guitarras pesadas cuál bola de demolición con propósito preestablecido.

El océano de sombras configura un vacío visceral materializado en “Void», una supernova de instauración del caos que dictamina la llegada de un nuevo orden. Una pieza única en su especie, futurista y renovadora que restablece los márgenes de la comunicación en el marco musical con un mensaje de alto voltaje que se empeña en meter los dedos en el enchufe.