Sons Of Apollo: MMXX

‘MMXX’ es el álbum que pretende convertir a Sons Of Apollo en una banda en sí misma, no en uno proyecto paralelo más de un Mike Portnoy incapaz de estarse quieto.

Tras un muy exitoso primer trabajo, este lanzamiento pretende lograr que el grupo deje de depender de covers para llenar sus setlists, elevándose así al estatus de banda por derecho propio, no un placebo de los proyectos de los que procede cada uno de los miembros.

Sonidos progresivos

El álbum abre con “Goodbye Divinity”, un tema que probablemente haya sido el culpable de que muchos consideren que con este trabajo Portnoy está regresando al sonido que hiciera célebre a Dream Theater, y es que su opulenta intro y sus arreglos bombásticos recuerdan a los primeros trabajos de la ex banda del batería. Una cañera y poco progresiva intro de batería nos mete de lleno en “Wither to Black”, una canción más directa que permite paladear las distintas influencias que marinan a este supergrupo, logrando un equilibrio que baila entre la fina línea que separa al progresivo del heavy metal clásico, dando pie a que Bumblefoot pueda lucirse con un solo de otro planeta.

“Asphyxiation” abre con un riff horripilante, no por su calidad, sino por la angustia que transmite y que marca cada segundo de sus 5:07 minutos de duración con una sensación de una aflicción tremebunda, como algo que sonaría en la mente de alguien que trata de escapar de una prisión estrecha y claustrofóbica, a la que sigue una suave transición a piano marca Sherinian que sirve para dar paso a la tranquila “Desolate”, que logra la imposible misión de aunar el agresivo registro de Jeff Scott Soto con una melodía deliciosamente cautivadora en una ataraxia que solo se podría haber producido al amparo de semejante banda de genios.

Volvemos al prog de la mano de “King of Delusion” y su intro a piano tan reminiscente de la música clásica, aunque el tema pronto se desencadena en una explosión de melodías y distintas entonaciones que se convierte en un auténtico viaje que mezcla un poco de todo lo que hace grande a este álbum. “Fall to Ascend” aparece como el mejor tema del trabajo dentro del aura prog establecida por su antecesora, combinando una excelsa intro de batería con una impresionante amalgama de la mano de Ron y Derek, que en cortes como este demuestran que esto no es un proyecto de Portnoy, sino un verdadero supergrupo en el que genialidades muy distinguidas pueden componer canciones auténticamente inusuales.

“Ressurection Day” empieza con una intro pegadiza y muy reminiscente de las influencias menos experimentales del grupo, sonando casi como los armónicos clásicos de los primeros grupos de heavy metal, pero pronto avanza hacia derroteros más esotéricos de la mano de los múltiples efectos con los que Sherinian llena los pequeños vacíos de la canción para culminar en un clímax progresivo que permite que el tema concluya en lo más alto.

Finalmente, y de la mano de la tradición universal de que sea el tema más largo el que cierre un trabajo, “New World Today” pone el broche de oro a ‘MMXX’ con una intro que llega a nosotros como un eco distante, haciendo imposible que no se la compare con la épica “Octavarium”, pese a que sean temas diametralmente distintos. La canción cumple con los estándares de las épicas más rimbombantes del género, y aunque probablemente necesite un artículo entero para explicarla en profundidad, estoy seguro que será la canción que venda el proyecto a los fans más obcecados.

Marca diferencias con su debut

‘MMXX’ es sin duda un trabajo mucho más progresivo que su antecesor, y creo que puede resultar más atractivo para aquel que descubra al grupo porqué sigue la estela de Portnoy, pero es algo totalmente diferente por derecho propio, un arriesgada amalgama de influencias y personalidades musicales que desemboca en una pieza excelente que es mucho más que la suma de sus partes. Si te gusta la banda de la que provienen cualquiera de los músicos que integran este proyecto, ‘MMXX’ es el disco perfecto para ti, pero si eres de los que considera esas otras bandas aburridas y anticuadas, ¿qué diantres?, escúchalo igualmente, ya que supone una bocanada de aire fresco muy agradable y muy necesaria en el panorama actual.