Puraposse: Sírvase

Tras su debut en 2017, Puraposse vuelven con ‘Sírvase’, el segundo álbum de estudio de la formación liderada por Aguayiko, guitarrista de Kaotiko.

‘Sírvase’ es el segundo disco de estudio de Puraposse, la banda que nació como proyecto paralelo de los hermanos Aguayo, guitarristas de Kaotiko. Para este trabajo, es solo Aguayiko quien se pone a los mandos, haciendo las labores de guitarra rítmica y voces, junto a Jokin (batería), Zelayika (bajo) y Erik (guitarra solista).

Comienzo reivindicativo

Sin medias tintas, “Las Calles” da comienzo al disco y deja claro por dónde van a ir los tiros. Ritmos sencillos, voces ligeramente rotas, aunque sin llegar al timbre de Kutxi Romero o Boni, todo ello aderezado con melodías de guitarra que te cautivan y se repiten en tu cabeza una y otra vez. Este primer corte, además, sirve como single para el álbum.

El bajo es lo primero que escuchamos en “Rock And Roll”, un tema que homenajea a este género, con melodías de guitarra típicas del punk y con un estribillo que evoca mucho a bandas como Barricada, algo constante a lo largo del trabajo. Los navarros han sido una influencia muy grande en la música punk de nuestro país.

“Eyacula” vuelve a contener un claro mensaje crítico hacia la sociedad y el manejo del miedo y el “que viene el lobo” como mecanismo de control. Una llamada a la rebeldía en toda regla con un ritmo facilón y que cala hondo. “Punky contento” es el tema antifascista que no puede faltar nunca en un disco de estas características. “Nazi muerto, punky contento”, un claro mensaje reivindicativo contra el auge de la extrema derecha en nuestro país, con un muro de guitarras distorsionadas que descargan toda la rabia necesaria para engrandecer el tema.

La parte más reivindicativa del disco queda apartada en “Postre Va A Caer”, un tema que saca a relucir el lado más festivo de la banda. En esta ocasión, con el sexo como protagonista, la canción tiene un toque más macarra y despreocupado, en consonancia con las letras. Las guitarras se hacen protagonistas al comienzo de “Sin Ausencia”, con un bonito arpeggio y una melodía que rápidamente desemboca en un ritmo que va in-crescendo hasta el estribillo, uno de los más melódicos del disco. Para este tema, la banda deja de lado la distorsión más agresiva para dar un sonido menos sucio y más rockero a las guitarras.

“Fuertes de mente” empieza con el típico redoble punk de batería al que pronto se incorporan unas guitarras que le dan al tema un rollo muy parecido al “Want You Bad” de Offspring. Incluso hay un pequeño parón en la parte central similar al que hay en la canción de los californianos.

Una balada punky

“Sentidos” se aleja por completo del estilo del resto de temas del disco. Las guitarras acústicas sirven como fondo para la voz durante casi toda la canción, mientras que la distorsión aparece en momentos contados, como los estribillos, y durante el solo de guitarra. “Montaje” es todo lo contrario a “Sentidos”. La otra cara de la moneda. Es como si la banda se sintiera sucia por meter una canción lenta y con guitarras acústicas y necesitara resarcirse. “Montaje” es un tema sucio, rápido, directo a la cabeza y con mucha mala hostia, tanto en el apartado instrumental, como en las letras.

Un ritmo machacón da comienzo a “A Piko Y Pala”, aunque rápidamente cambia a otro más estándar para volver a sacar a relucir la mala lecha y la rabia, en un tema que habla sobre la conciencia obrera. De nuevo la crítica social hace acto de presencia, algo más necesario que nunca. Ya hacia el final del disco, “Clasista” sigue con la crítica social y los mensajes afilados, mientras la banda incluye un pequeño guiño a Barricada y su “Oveja Negra”.

Para terminar, “Quiero A Mi Perro” pone el cierre al trabajo. Otro tema rápido lleno de mala leche y que nos deja un mensaje muy claro: cuanto más conozco a la gente, más quiero a mi perro. ‘Sírvase’ es un trabajo notable, cargado de crítica social y que, pese a conservar las raíces y los elementos clásicos del punk español, añade una capa más de melodía que permite que las canciones sean pegadizas, disfrutables y resuenen en la cabeza del oyente.