Primal Fear: Metal Commando

‘Metal Commando’ es el nuevo trabajo de Primal Fear. Los alemanes presentan su nueva obra en plena crisis del coronavirus, esperando poder salir a la carretera cuanto antes para presentarlo.

Asiduos del circuito festivalero español, Primal Fear nos presentan su nueva obra, ‘Metal Commando’. Los chicos de Mat Sinner y Ralf Scheepers ya llevan unos años en esto y saben cómo contentar a sus fans. Canciones directas, potentes y con un estilo clásico es lo que podemos encontrar en este nuevo trabajo de los alemanes, aunque con un sonido de lo más actual.

Un álbum lleno de fuerza

“I Am Alive” sigue la típica estructura de canción de inicio. Riffs potentes con afinaciones de guitarra graves, estribillo pegadizo y algunos arreglos de teclado son las características principales de este tema. Destaca el punteo de guitarras y la poderosa voz del incomensurable Ralf Scheepers, que sigue en forma. Esto queda patente en el siguiente corte, “Along Came The Devil”, donde Scheepers hace gala de sus registros más agudos a lo largo de la canción.

“Halo” tiene un aire power metalero, con melodías muy “helloweenescas”. Es un tema rápido en el que, además de las clásicas voces agudas, destaca la batería con su doble bombo, además de la parte central con los solos de guitarra doblados.

“Hear Me Calling” combina perfectamente la fuerza de las 3 guitarras del combo alemán, con estrofas en limpio, en las que se hace más audible el bajo del fundador Mat Sinner. Pero “The Lost & The Forgotten” nos devuelve a la potencia del heavy metal teutón más clásico, con grandes coros que apoyan las labores vocales de Scheepers.

Primal Fear aprovechan el poderío de sus tres guitarristas, y lo demuestran en temas como “My Name Is Fear”, plagado de riffs potentes y melodías armonizadas, para culminar en varios solos de guitarra también armonizados. Al igual que en la anterior “Halo”, el ritmo frenético del bombo se puede apreciar a lo largo de los 4 minutos.

“I Will Be Gone” pone una necesaria pausa al disco a modo de balada. Las guitarras acústicas dan paso a la voz de Ralf Scheepers, en un registro muy similar al que utiliza Blackie Lawless en “Forever Free”. Las armonías vocales son exquisitas, demostrando por qué Scheepers siempre ha sido uno de los grandes cantantes del género. “Raise Your Fists” devuelve la caña, aunque esta vez con un estilo más ochentero, con unos punteos muy del estilo de los grupos de hard rock de esa época. Por supuesto, el tema cuenta con un estribillo con coros fácilmente recordables, y que terminan de darle ese aire clásico de la época.

“Howl Of The Banshee” sigue con la tónica general del disco. Las guitarras se lucen con espectaculares armónicos, sobre todo en el estribillo. Scheepers también tiene sus momentos de gloria con agudos marca de la casa. “Afterlife” es otro de los temas rápidos del disco, con riffs potentes y doble bombo a gran velocidad. El estribillo se repite varias veces al final, en lo que es, probablemente, una de las canciones menos inspiradas del trabajo.

Su canción más larga

Para cerrar el álbum, Primal Fear presenta la que es su canción más larga hasta la fecha. “Infinity” cuenta con algo más de 13 minutos de duración y varios pasajes en los que la banda se ha explayado a gusto. Comienza con varias campanas sonando durante una tormenta, que da paso a las guitarras en limpio. Scheepers canta casi en un susurro hasta que el tema acelera y pasa a una parte más cañera y potente. La melodía de voz del estribillo es apoyada por la guitarra, creando un efecto que funciona muy bien.

Después de dos estribillos, viene un puente con armonías de guitarras, antes de dar paso a varios solos en los que los guitarristas dan rienda suelta a su talento. Un parón precede a otra parte, esta vez con guitarras acústicas en arpegios y una melodía por encima, tras la que Scheepers vuelve al registro que emplea al principio del tema.

Tras volver a los estribillos y la melodía principal, escuchamos las campanas y la tormenta del principio, aunque acompañados por una voz grave al estilo gregoriano. Es el preludio de otra parte con pianos y teclados, con cierto aire fúnebre, tras la que finalmente, con un break de batería, se encara el desenlace del tema con una melodía armonizada de guitarras acompañando al teclado. Para finalizar, unos oscuros toques de piano terminan poniendo el punto final a la que, probablemente, sea la canción más compleja que la banda ha compuesto hasta ahora.

Primal Fear han hecho los deberes con ‘Metal Commando’, haciendo un buen disco. Pese a que algunos temas pasan algo desapercibidos, los fans de la banda y del heavy metal más clásico quedarán satisfechos con el trabajo de los germanos.