New Years Day: Unbreakable

'Unbreakable' es el nuevo y mejor disco de New Years Day hasta la fecha. Aquí tenéis la crítica de una de las bandas que están llamadas a liderar la escena femenina metálica de los próximos años.

Muchos son los cambios de formación que han sufrido New Years Day, ya no solo desde su inicio hace más de una década sino también desde su anterior larga duración ‘Malevolence’, con lo que parece que cada nuevo trabajo de la banda californiana es un nuevo comienzo para Ash Costello y compañía. Eso sí, parece haber encontrado en su compañero Nikki Misery a la pareja perfecta para dar vida a todas sus inquietudes líricas y musicales.

Atrás quedaron los tiempos de MySpace y los ecos de pop punk y post hardcore adolescente que desprendía su debut ‘My Dear’ o, en menor medida, un ‘Victim to Villain’ que ya marcaba el camino de un estilo y una madurez que con su nueva obra, ‘Unbreakable’, definen a la perfección. Un firme puñetazo en la mesa que les llevará en breve a encabezar su propio tour después de compartir cartel alrededor del mundo con grupos como Escape the Fate, Falling in Reverse, Halestorm o In This Moment.

Comienzan fuerte al ritmo de un riff eléctrico de un «Come For Me» que coquetea constantemente con el metal industrial más vanguardista al más puro estilo Motionless in White y que vocalmente firmaría sin dudarlo un segundo Maria Brink con sus In This Moment. «MissUnderstood» es otro de los momentos más álgidos del álbum con una intensidad increscendo que por momentos recuerda a la mejor versión de Lzzy Hale de Halestorm (no es casual que vayan a compartir tour en breve con las dos últimas bandas mencionadas) que desata toda una tormenta metálica en su impecable estribillo.

Un espíritu irrompible

El que fuera su primer adelanto, «Skeletons», define y reúne con inteligencia y estilo propio la diversidad de influencias que componen el imaginario de Costello. Guitarras propias del nu metal con Misery y Austin Ingerman formando un potente tándem rítmico y su front woman exhibiendo unos registros vocales que le llevan de la delicadeza de la Bella a la ferocidad de la Bestia.

«Unbreakable» es el tema que dá título al disco y no nos extraña ni un ápice. Un grito de guerra y libertad con unos versos capaces de destrozarte las cervicales y, quizás, el mejor estribillo que han firmado jamás. Una composición rica en matices, de una producción envidiable y una enérgica melodía que la convertirán en todo un himno. No tardaremos en comprobarlo.

Como ya demostraron en su reciente EP de versiones ‘Diary of a Creep’ sus influencias van de Garbage a Pantera, pasando por No Doubt o Linkin Park, y «Shut Up» es un perfecto ejemplo de ello. De hecho, sino estuviera arropada por sus afiladas guitarras sería mucho más latente su espíritu pop capaz de despertar las miradas celosas de artistas como Katy Perry o Taylor Swift en lo alto de la lista de éxitos de la radiofórmula.

«Done With You» descarga toda la ira metálica atrapada en su interior que tan solo se permite un segundo de aliento antes de explotar definitivamente en un estribillo que nos traslada fácilmente a un tiempo no muy lejano en el que bandas como Evanescence abanderaban el género. Por cierto, es de agradecer el pequeño solo de guitarra tan poco frecuente en sus composiciones a pesar de contar entre sus filas con una pareja a las seis cuerdas.

Como si se tratara de una película de terror antes de la irrupción de un emotivo sonido de teclado nos presentan «Poltergeist», un medio tiempo tan delicado como intenso que estalla en el agónico y rasgado llanto de su poderoso estribillo. Aquí se mezclan los elementos acústicos, eléctricos y electrónicos bajo un manto de complicidad absoluto. «Break My Body» es una invitación al baile headbanging de estribillo simplón pero efectivo, cargado de fuerza, que nos permite gritar a los cuatro vientos contra la adversidad y los obstáculos que la vida, y las personas, nos van interponiendo en su devenir. ¡Aceptemos el reto!

Hay cortes que entran con una estimable facilidad como es el caso de «Sorry Not Sorry». Melódica, pegadiza, potente y con un estribillo marca de la casa que implora por un perdón que no debería ser tal. Otra de esas letras que tan bien definen su target y que se han convertido en santo y seña de su identidad. «My Monsters» sigue explotando esos mismos caminos gracias a una belleza y crudeza sonora en perfecta harmonía con la honestidad de unas letras capaces de encontrar un pequeño resquicio dentro de los corazones de tantos de nosotros en los que salvaguardarse. Imaginaos la versión más heavy de Lady Gaga y podréis haceros una idea de lo que os hablo.

Sobreviviendo a las adversidades

Como si se tratara de la banda sonora de un cuento de terror de tintes góticos llegamos a «Nocturnal», convirtiéndonos en criaturas de la noche cautivas de sus tétricas y densas melodías. A nivel vocal, Ash Costello sigue dando muestras de sus diversas texturas de voz siempre bien arropadas por los inseparables acordes de Misery y la musicalidad que Ingerman y el bajo de Frankie Sil aportan al conjunto.

«I Survived» pone el punto y final manteniendo intacta la esencia que desprende todo el álbum con toda una declaración de intenciones constante a lo largo del compacto. Poco importa que no nos entiendan o que nos rompan en pedazos, no pensamos pedir perdón ni callarnos jamás. Sobreviviremos.

Resulta curioso que después de unos años trabajando con el productor Erik Ron, habitual de bandas como Motionless in White o Panic! at the Disco, hayan decidido emprender un nuevo camino de la mano de Mitchell Marlow (In This Moment) y Scott Stevens (Halestorm), pero a juzgar por el resultado la jugada no les podría haber salido mejor.

Puedo afirmar sin miedo a equivocarme que ‘Unbreakable’ es el mejor disco de New Years Day hasta la fecha y que Ash Costello está llamada a ser una de las grandes líderes femeninas del panorama del metal actual. Una pena que de momento no podamos disfrutar de su directo en nuestro país pero ojalá le pongamos una solución lo antes posible. Aún estamos a tiempo.