Malevolence: Malicious Intent
Dentro del universo del heavy metal suele haber cierta incredulidad en cuanto aparece alguna banda cuyo estilo musical incluya el termino “core” e incluso “groove”. Los argumentos son diversos y suelen coincidir en que estas agrupaciones generalmente quieren reproducir un sonido pesado, incluso brutal, que se descafeína con la voz.
Si esto es cierto, o no, depende de los gustos de cada uno. Ahí el espectro es bastante amplio y además hay que tener siempre en cuenta que fue una mezcla de géneros musicales, en este caso el heavy metal clásico con el punk, lo que desencadenó la gran variedad de estilos que hoy tiene el heavy metal. Al final es precisamente eso: hea-vy me-tal.
En ello coincide Alex Taylor, vocalista de los ingleses Malevolence que este 20 de mayo vuelven a la carga con su tercer larga duración bajo el nombre de ‘Malicious Intent’, un título que le hace justicia a este trabajo de poco más de 37 minutos de duración en el que se aprecia un sonido mucho más maduro, fuerte y compacto que parece reivindicar al metalcore y al groove metal. Si lo logra o no, ya es otro tema.
It’s grim up North
La gente del Reino Unido suele usar la frase “It’s grim up North” en referencia a que la vida en la parte norte de aquellas tierras es más dura en comparación con el resto del territorio. Esto también se aplica en la música y si no que se lo pregunten a Paradise Lost, que crearon toda una escena en torno a esta oscuridad norteña.
Tal idea también fue asimilada por Malevolence, quienes aprovecharon los días de pandemia para recrudecer su sonido e ir un paso más adelante en su propuesta musical, con un disco que rompe los estándares del metalcore y que a pesar de ser melódico, tiene momentos de brutalidad y una voz cruda que rompe los prejuicios.
Un inicio discreto vía “Malicious Intent”, con guitarras pesadas y algunos brotes violentos logrados a través de la ejecución de Konan Hall y Josh Baines, vaticina que se trata de un álbum que quiere sacudirse cualquier prejuicio. Justo en ese momento aparece “Life Sentence”, una de las mejores piezas de este álbum y en la cual se aprecia la gran influencia de bandas como Crowbar, Pantera y Hatebreed. Riffs intensos y una batería ensamblada casi con precisión milimétrica, demuestran que Malevolence, sin perder su estilo, decidió explotar –que no explorar- senderos sónicos un poco más oscuros y el resultado, sin ser espectacular, supera con creces sus trabajos anteriores.
Hay que ser justos y decir que los de Sheffield imprimieron una tonalidad oscura a cada canción de este trabajo. Quizá unas en mayor o menor grado, pero esa tenebra está ahí y la muestra más clara es “On Broken Glass”, cuya intro lenta tiene ese toque “grim” que posteriormente explota en un ritmo mucho más “groove” que atrapa a los oídos sin ningún remordimiento.
Esto ayuda en gran medida al juego de voces Alex Taylor, quien no niega la influencia de Jamey Jasta, de Hatebreed, aunque a la vez rinde una bizarro homenaje al Phil Anselmo del aclamado ‘Far Beyond Driven’ de Pantera, una fórmula que se repite en “Still Waters Run Deep”, aunque en este caso la melodía tiene toques mucho más tirados al hardcore y, nuevamente, resalta el trabajo brillante de los golpes certeros de Charlie Thorpe en la batería.
Es simplemente heavy metal
Bien lo dijo Taylor en los días previos al lanzamiento del disco: la intención era salir de la zona de confort, dejar a un lado las etiquetas y simplemente tocar el heavy metal que les salía de las entrañas. El paso fue tan seguro que hasta se dieron el lujo de grabar “Higher Place”, que podría considerarse la canción bizarra de este trabajo y en la que destaca un solo de guitarra intenso muy al estilo de las power-ballads, así como el juego de voces limpias y más agresivas del binomio Hall-Taylor.
El abanico sonoro continúa con “Karma”, con guiños muy obvios al “Gothenburg Sound” y no hay que desgarrarse las vestiduras que ‘Slaughter of the Soul’ the At the Gates es considerado uno de los discos angulares para que detonara el metalcore-.
Aquí, particularmente, el sonido recuerda mucho a los matices que Jesper Stromblad le imprimió al ‘Clayman’ de In Flames, con esa guitarra que atrapaba a nuevos fans y decepcionaba a quienes los crucificaron por haber abandonado la gloriosa senda del death metal (melódico je,je,je).
La parte final del disco, si bien disminuye en cuanto a intensidad más no en pesadez, con temas como «Do or Die» y «Armageddon», ofrece dos cortes -muy similares, por cierto- que le dan un plus entre aquellos a quienes les guste el género y les apetezca escuchar este ‘Malicious Intent’. El primero es “Above All Else”, con la colaboración de Matt Honeycutt, de los texanos Kublai Khan, así como “Salvation”, con la participación de Matt Heafy, guitarra y voz de Trivium.
De esta última se pueden destacar el intenso solo de guitarra que imprime un sello de angustia a la canción, así como el hecho de que la inclusión de Heafy es un sueño hecho realidad para Alex Taylor, puesto que Trivium es una de sus bandas favoritas. Trabajo cumplidor y que supera por mucho a la media de la fiebre “core” en el universo metálico.
Israel Téllez
Grupo:Malevolence
Discográfica:Nuclear Blast Records
Puntuación:5
Canciones:
- Malicious Intent
- Life Sentence
- On Broken Glass
- Still Waters Run Deep
- Higher Place
- Karma
- Above All Else
- Do Or Die
- Salvation
- Armageddon
Año:2022-05-20
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