Infernal Hate: The Order Of The Black Kestrel

Procedentes de las Islas Canarias, Lanzarote concretamente, Infernal Hate se definen como death metal volcánico, nada más ajustado a la realidad. No solo por su lugar de origen, sino también por su “explosiva” propuesta.

Como se suele decir, Infernal Hate ha ido quemando etapas; empezando desde su fundación en 2000 por Seven García “Sevensui”, responsable en 2003 de su debut ‘The Wisdon Of Obscure Dimension’ junto al batería Fabio Ramírez; pasando por la incorporación de David (bajo) y Mostro (batería) con la publicación de dos nuevos álbumes: ‘Negrophorus Humator’ (2006) y ‘Abicen Abora’ (2011); hasta llegar a la actualidad, con una determinante experiencia  acumulada que les ha permitido publicar, diez años después, un cuarto álbum titulado ‘The Order Of The Black Kestrel’, con unos fundamentos sólidos afincados en el death metal pero con algunos matices procedentes del black metal.

Epica, brutalidad y armonía

Conjugar agresividad con armonía no siempre es una opción de la que se pueda salir triunfante, sin embargo, Infernal Hate lo consiguen en ‘The Order Of The Black Kestrel’, a pesar de que su inicio, con “Aprositus” resulte de lo más abrupto con su arrollador riff, su cavernosa voz y una batería instalada en una dinámica de auténtica locura.

Al sonar “Black Crows Over The Horizon”, ya se puede percibir que los canarios saben diversificar parámetros con imaginación, añadiendo un trasfondo épico en una vorágine sonora demoledora combinada con ritmos tribales y un elegante final de guitarra acústica. Elementos que se vuelven a percibir en “Ex Nihilo” y su hipnótico riff guitarrero.

Llegado el momento de escuchar la frenética “Lies Against Humanity”, quedan claros algunos planteamientos sobre los que se sostienen las composiciones de Infernal Hate y son, que su death metal tiene conexiones con el black en lo que respecta a las guitarras así como algunas partes vocales que, a su vez, también alcanzan registros cercanos al grind.

Una progresión convincente

Si quedaban dudas de la capacidad de Infernal Hate para encontrar variantes seductoras, llega el turno de “Vulcanoapocalypsis”, para introducir esa aludida armonía hacia la mitad del tema, sin por ello perder agresividad.

Las tendencias black pueden notarse también en la épica “The Hidden Knife”, otra de las piezas donde las guitarras aportan armonía en su parte final, al igual que sucede con mayor énfasis en “I Sovereign”, acompañadas de una pegada muy orgánica de la batería y una atmósfera provista de una atractiva solemnidad, además de unas voces que diversifican sus tonalidades entre death, grind y black.

El álbum se cierra con “Empirical  Knowledge”, composición en la que aparecen todos los ingredientes ya reseñados, además de unas voces femeninas en clave operística, para confirmar que ‘The Order Of The Black Kestrel’ es todo una avance en la trayectoria del grupo canario que, debido a su diversidad estilística, puede afrontar su futuro con optimismo explorando las diversas opciones que ofrece el lado más extremo del metal.