Caliban: Dystopia

Posiblemente Caliban no hayan conseguido la atención que se merecían de los medios de comunicación, sin embargo, ofrecen unos planteamientos más versátiles que otras bandas de metalcore mejor posicionadas ante la prensa especializada.

El metalcore tiene un valor seguro en los germanos Caliban, banda prolífica donde las haya, ‘Dystopia’ es ya su álbum número 13 contando ‘Zeitgeister’, publicado el pasado 2021 y al que también se cataloga como un EP debido a su corta duración, poco más de 32 minutos.

Tras experimentar con su idioma nativo, Caliban vuelven al inglés para exhibir las cualidades que han forjado su sólida trayectoria, convirtiéndose en una importante referencia dentro de su estilo. ‘Dystopia’, es “hijo de la pandemia”, los integrantes de Caliban tuvieron que componer sus partes en pleno aislamiento y el resultado refleja el estado de tensión en el que se vivía transmitido a través de una violencia inusitada y una dureza descomunal en las texturas de las canciones.

Gran sonido y batería determinante

Es cierto que el metalcore no permite excesivas “alegrías” estilísticas en sus férreas estructuras. Dentro de lo posible, Caliban, en esta nueva obra, tratan de amenizar las canciones creando repentinos cortes de dinámica o añadiendo efectos aquí y allá para evitar la recurrencia rítmica en la que incurren otras formaciones hasta llegar a extremos que rozan el aburrimiento.

Arropado por un sonido impecable conseguido gracias a la magnífica producción a cargo de Benjamin Richter y el propio guitarrista de Caliban, Marc Görtz, si algo marca la diferencia en ‘Dystopia’ es el impresionante trabajo de Patrick Grün detrás del kit de batería. Sin su apabullante expresividad así como su versátil y contundente pegada el álbum perdería parte de su atractivo.

De entrada, “Dystopia”, tema que da título al álbum, tiene un ímpetu abrumador administrado a través de la aplastante sonoridad de la batería, secundada por unas guitarras de riffs erosivos además de la irascible voz de Andreas Dörner que contrasta con el registro melódico del estribillo a cargo de Christoph Wieczorek de ‘Annisokay’.

La desgarrada agresividad de la voz solista, los estribillos melódicos, los riffs corrosivos de afinación grave y, por sobre todas las cosas, la demoledora batería, son una constante en ‘Dystopia’ y uno de los temas prototipo donde estos detalles salen a relucir es “Phantom Pain”.

Variantes que marcan las diferencias

Durante el desarrollo del álbum se pueden descubrir variantes que potencian el resultado final de la grabación como, por ejemplo, los efectos electrónicos que interrumpen el ritmo de forma momentánea en “Ascent Of The Blessed” y que se repiten an algún otro tema; los injertos melódicos de voces y guitarra de “Alien” o, en la dinámica salvaje de “sWords” y “Virus”, esta última con la colaboración del vocalista Marcus Bischoff  de ‘Heaven Shall Burn’.

Los elementos digitales también conviven con los trazos virulentos, la dualidad vocal y la magestuosidad de la batería en “Darkness I Became”. Llegados a este punto, todos los secretos del sonido de Caliban han sido puestos al descubierto y solo queda hacer una reverencia a Patrick Grün por su rotundidad en la pegada y su capacidad para conseguir que la batería se convierta en un elemento imprescindible en el entramado de ‘Dystopia’.

El resto de las composiciones solo hacen que ratificar la fórmula, manteniendo la virulencia instrumental y el protagonismo de la batería con la armonía de los sugestivos estribillos y la belicosidad de la voz solista. Ahí está “Dragon” y sus envolventes y oscuras atmósferas, que cuenta con la colaboración de Jonny Davy, vocalista de Job For A Cowboy.; “Hibernate” y su engañosa delicadeza;  “mOther” con su arrebatadora dualidad y “The World Breaks Everyone” con su contagioso ritmo corroborando todas las cualidades expuestas a lo largo de la grabación. En definitiva, ‘Dystopia’ es un álbum tenso y angustiante, que puede resultar agotador, pero que incluye contornos melódicos que evitan la saturación auditiva del oyente.