‘20/20 Vision’ no sorprende ni se sale de lo esperado. La banda estadounidense que fue una de las mejores encontrando el término medio entre el punk rock melódico y el punk más visceral, continúa decantándose por un sonido más melódico manteniendo, por otro lado, un marcado mensaje en sus letras en pro de lo que consideran justo.

Los de Pittsburgh han ido perdiendo con el paso de los años ciertos elementos sonoros que los hicieron únicos en su momento. Esas furiosas guitarras, unas líneas de bajo siempre presentes desde la entrada de un jovencísimo Chris #2 en la banda, y una combinación vocal entre el mismo Chris y Justin Sane cargadas de rabia, han ido perdiendo fuerza en pro de elementos melódicos más primarios y anodinos. Sin embargo, su esencia nunca se ha ido del todo, manteniendo ese cabreo y esa firma personal tan marcada, aunque su estado actual sea más difuminado. Un elemento que no ha cambiado han sido sus directos, tan potentes y dignos de ver como siempre.

Una evolución en dirección a la melodía

Por otro lado, tampoco se puede negar que ha dado como resultado más de una canción reseñable que pasará a la lista de sus himnos, ningún cambio es negativo en su totalidad. Por tanto, a pesar de que su música defiende cada vez más el uso de elementos melódicos – o, al menos, un estilo menos agresivo que el de sus primeros álbumes-, siguen siendo Anti-Flag y siguen igual de enfadados que siempre. De hecho, no les faltan motivos. La situación política de su país y las guerras actuales son inspiración más que suficiente para encender la cerilla de unos activistas que se mantienen fieles a sus principios en contra de las injusticias casi 3 décadas después de su comienzo como banda.

‘20/20 Vision’ se hace muy breve pese a estar formado por nada menos que 11 canciones. Sin embargo, sus estructuras sencillas y directas las hacen breves y el álbum se escucha en un suspiro. Se puede apreciar una acertada combinación de distorsión y melodía en la canción que abre el álbum «Hate Conquers All», con coros pegadizos cargados de rabia. Las melodías adictivas y sencillas se mantienen en «It Went Off Like A Bomb», donde los gritos pasan a un segundo plano, pero siguen manteniendo la fuerza y la adrenalina. En el caso de la homónima «20/20 Vision», recuerda a melodías más suaves similares a canciones como “The Ghost Of Alexandria”. Por tanto, su estilo es más similar a la nueva era de Anti-Flag que las canciones que abren el álbum.

Una esencia que se resiste a morir

El disco continúa con una de las canciones más auténticas del álbum, «Christian Nationalist», sin ser capaz todavía de destacar en exceso, pero sí deja un buen sabor de boca con sus coros pegadizos y su ritmo animado. El estilo de la canción que llega a continuación, «Don’t Let The Bastards Get You Down», es similar, con vivas melodías pero con una sencillez excesiva que hace que la canción no destaque demasiado. Sin embargo, a pesar de su sencillez, sigue manteniendo esa fórmula que te engancha. Esa fórmula brilla con mejor resultado con «Unbreakable», que tiene algo más de vida y una simpleza menos evidente. A continuación se sube el listón con la joya escondida del álbum, «The Disease», prueba de que los de Pittsburgh saben hacer grandes canciones si se ponen serios. No se sale de la técnica utilizada anteriormente, pero sí se usa de forma más acertada, dando como resultado el temazo del álbum. Cerca del final, todavía les quedaba algo de carne en el asador. La cañera «A Nation Sleeps» viene cargada de fuerza, al igual que «You Make Me Sick», que juega con subidas y bajadas de intensidad. Terminan esta breve pero intensa aventura con «Un-American», una bonita y viva balada, y «Resistance Frequencies», con un estilo sonoro alegre y melódico.

A pesar de que han perdido fuerza y ya no suenan como aquellos álbumes que los catapultaron como la banda que son ahora, como podría ser el fantástico y furioso ‘For Blood And Empire’ (2006), siguen siendo Anti-Flag. Por tanto, no sorprenden, ya se han asentado en esta nueva línea sonora y no esperamos que vuelvan atrás. La evolución es real y está afianzada, y no es necesariamente peor, sino diferente. Sin embargo, ese toque tan suyo sigue presente, con sus combinaciones vocales, sus estribillos adictivos y sus sencillas y alegres melodías. Anti-Flag sigue ahí, y seguirán por mucho tiempo, ya que un nivel de respeto como el que se han ganado en sus casi 30 años de carrera, se puede permitir resistir una evolución hacia sonidos menos agresivos. Su lucha ahora mismo es no estancarse y no perderse. De momento, su esencia se resiste a morir.

Olga Vidal

Grupo:Anti Flag

Discográfica:Spinefarm Records UK

Puntuación:7

Canciones:

  1. Hate Conquers All
  2. It Went Off Like A Bomb
  3. 20/20 Vision
  4. Christian Nationalist
  5. Don't Let The Bastards Get You Down
  6. Unbreakable
  7. The Disease
  8. A Nation Sleeps
  9. You Make Me Sick
  10. Un-American
  11. Resistance Frequencies

Año:2020-01-17

Votación de los lectores:5